Trudeau declaró en una rueda de prensa en Ottawa que Canadá está estudiando "de forma cuidadosa" lo sucedido "antes de sacar ninguna conclusión" sobre lo sucedido en el hospital, donde según fuentes palestinas murieron alrededor de 500 personas el pasado martes.
"Nos lo estamos tomando con extrema seriedad por toda la intensidad con la que la gente está viviendo esta horrorosa pérdida de vidas", añadió.
Medios de comunicación canadienses han señalado que las autoridades israelíes han presentado al embajador de Canadá en Israel las mismas pruebas que proporcionaron al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y que supuestamente identifican al grupo Yihad Islámica como autor de la masacre.
Pero Trudeau insistió en que lo que ha sido presentado son "pruebas preliminares" y que Canadá "seguirá trabajando" con sus aliados para establecer "exactamente" lo sucedido.
El primer ministro canadiense también se mostró reacio a comprometerse a viajar a Israel, algo que sí han hecho Biden y el primer ministro británico, Rishi Sunak.
Trudeau recordó que ha estado en numerosas ocasiones en la región y que viajará de nuevo cuando su presencia pueda ser una ayuda para conseguir "paz y estabilidad".