La ministra ha hecho estas manifestaciones durante su intervención en un debate en el Club Siglo XXI, en el que ha estado arropada por la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz; por la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcárce, y por la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Esperanza Casteleiro, entre otras personalidades.
Robles ha resaltado la importancia de que tanto la OTAN como la Unión Europea se hayan mostrado y se estén mostrando unidas en su ayuda a Ucrania frente a la agresión rusa, un apoyo que, ha recalcado, no puede decaer.
Ha reiterado, una vez más, que España se va a seguir volcando con Ucrania: "Es una batalla que no podemos perder, nos estamos jugando mucho".
En este contexto de unidad, Robles ha mostrado su preocupación por las palabras de Trump, "desde todos los puntos de vista inaceptables", en las que dijo que "va a permitir" que Rusia ataque al aliado de la Alianza Atlántica que no llegue a un gasto en defensa del 2 % del PIB.
Ha recordado que la voluntad del Gobierno es llegar a ese porcentaje del PIB en 2029 y ahí -ha dicho- "la industria tiene un papel importante".
En este sentido, ha pedido a las empresas de defensa que hagan un esfuerzo importante para crear puestos de trabajo de todo tipo, desde el más cualificado al menos, pero que inviertan en ello.
También se ha referido a la guerra que se libra en Gaza y, tras condenar el ataque de Hamás, pedir la liberación de los rehenes y denunciar los ataques israelíes a mujeres y niños, ha señalado que la solución pasa por un alto el fuego inmediato y la existencia de dos Estados.
Preguntada sobre si España ha vendido armamento a Israel desde que comenzó el conflicto, ha afirmado rotunda que "el Ministerio de Defensa no envía armas a ningún país", salvo a Ucrania, aunque ha dicho ignorar si hay empresas que lo están haciendo.
Robles ha manifestado su enorme preocupación por la situación en el Sahel y ha advertido de que como Europa se retire de África va a dejar una puerta abierta a Rusia, al terrorismo yihadista y a las mafias de la inmigración.