Periodistas de la RAI y sindicatos alertan de que Italia se acerca a la Hungría de Orbán

"Italia entró en la zona problemática y ahora estamos junto a la Hungría de (primer ministro Viktor) Orbán", dijo Vittorio de Trapani, reportero de la RAI y presidente de la Federación Nacional de Prensa Italiana (FNSI) en una rueda de prensa con otros colegas en la sede de Asociación de la Prensa Extranjera de Italia.

La situación del periodismo del país ha ido empeorando, sobre todo el último año, en un contexto general de "ataque a las libertades constitucionales", según De Trapani, que destacó que "en uno de los países fundadores de la UE" como Italia "se está atacando el derecho fundamental a la libertad de prensa".

El presidente de la FNSI se refirió al reciente informe anual sobre libertad de prensa de Reporteros Sin Fronteras (RSF), en el que Italia cayó del puesto 41 al 46 entre 180 países analizados y en el que se afirma que hay grupos políticos que buscan "tomar control del ecosistema mediático, tanto a través de medios estatales bajo su control como a través de medios privados".

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RSF mencionó como ejemplo el hecho de que un magnate que también es diputado y miembro de la coalición de Meloni, Antonio Angelucci, intenté ahora comprar la agencia de noticias AGI, la segunda más importante del país.

"Creo que este es el momento en que debemos estar juntos, debemos entender que están atacando todos los derechos y libertades", añadió Trapani, quién apeló a la movilización a la calle y entre distintos sectores de la sociedad para revertir la situación actual.

Daniele Macheda, secretario de Usagrai -principal sindicato de los periodistas de la cadena-, apeló a "defender la libertad de los periodistas" y denunció también la precariedad en la que muchos están trabajando en la televisión pública.

"La información es un bien para los ciudadanos que protegemos igual que el médico protege la salud de la ciudadanía", remarcó Macheda. Según aseguró, desde el Gobierno de Matteo Renzi (2014-2016) han aumentado los intentos de poner "el control de la RAI a manos del Ejecutivo".

Esta dinámica, para Sigfrido Ranucci, periodista del programa de periodismo de investigación Report en RAI 3, "empeoró sobre todo en el último año" y citó como ejemplo que Meloni definió como "linchamiento" una investigación de la cadena pública sobre la apertura en Albania de centros de gestión de migrantes llegados a Italia.

Ranucci denunció también presiones y "peticiones de los políticos" hacia los periodistas en el canal público, lo que está generando "un problema en relación a la libertad de prensa".

La huelga en la RAI se produce tras semanas de protestas en que sus empleados denuncian estar sujetos a "un control asfixiante" para que la información sirva de "megáfono" del Gobierno de Meloni.