El portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Lin Jian, declaró hoy que "aunque la 'doctrina Monroe' pueda haber sido declarada muerta en teoría hace más de 200 años, el hegemonismo y la política de poder en su núcleo están lejos de haber desaparecido".
China apoya firmemente la “posición justa” de los países latinoamericanos en la “oposición a la interferencia extranjera y la salvaguarda de la soberanía nacional”.
"Estados Unidos no debería ignorar las preocupaciones razonables y las justas voces de los países latinoamericanos", agregó Lin.
Además, aconsejó a Washington "abandonar cuanto antes la obsoleta 'doctrina Monroe' y el intervencionismo", cesando las acciones unilaterales de acoso, coerción, sanciones y bloqueos.
El vocero de la Cancillería subrayó la necesidad de desarrollar relaciones con los países de la región "sobre la base del respeto mutuo, el trato igualitario y la no injerencia en los asuntos internos," para llevar a cabo una cooperación mutuamente beneficiosa.
Lin también enfatizó que "la tendencia hacia la independencia y el autodesarrollo de los países latinoamericanos es imparable," mientras que el contraflujo del hegemonismo y la política de poder de Estados Unidos "es impopular y está destinada a ser eliminada por los tiempos."
Pekín destacó que la reciente crítica de líderes latinoamericanos, como el rechazo del presidente mexicano López Obrador a los comentarios del embajador estadounidense sobre la reforma judicial, y la condena del presidente hondureño Castro a la intervención de Estados Unidos, reflejan la creciente oposición en la región a las acciones unilaterales y coercitivas de Washington.
"América para los americanos" fue la frase con la que el presidente estadounidense James Monroe estableció hace 200 años una doctrina originalmente anticolonialista, pero que a lo largo de la historia ha sido utilizada por Washington para justificar su intervencionismo en Latinoamérica.