"Queremos llevar nuestra inversión a 1,5-1,6 billones de rupias (entre 18.000 y 19.000 millones de dólares) cada año", afirmó el director financiero del grupo, Jugeshinder Singh, en una entrevista publicada por la cadena de noticias india NDTV, de propiedad del mismo Grupo Adani.
El directivo precisó que el dinero se destinará a nuevos proyectos. "No estamos hablando de adquisiciones aquí; todo esto es gasto de capital en proyectos nuevos desde cero (greenfield)", aclaró.
Según detalló Singh, la gran mayoría de este capital, entre un 83 % y un 85 %, se destinará al sector energético, con el objetivo de multiplicar por siete la capacidad de energía renovable del grupo y duplicar la de energía convencional.
El resto se repartirá entre materiales de construcción (10 %) y el negocio de minería y metales (6-7 %).
El director financiero detalló un plan en el que la mayor parte del gasto anual provendrá de los flujos de caja internos. "Nuestra deuda está aumentando a un ritmo muy inferior al de nuestro crecimiento", aseguró, estimando que la deuda neta añadida anualmente será de unas 25.000 millones de rupias (unos 3.000 millones de dólares).
Este anuncio se produce casi dos años después de que el informe del vendedor en corto estadounidense Hindenburg Research acusara al grupo de manipulación de acciones y fraude contable.
Aunque Adani negó rotundamente las acusaciones, el informe provocó un desplome de más de 100.000 millones de dólares en el valor de mercado de sus empresas.
El plan de Adani también se alinea con la estrategia de crecimiento del Gobierno indio. "Continuaremos invirtiendo en nuestros negocios de infraestructura clave, como puertos y aeropuertos, que son fundamentales para la historia de crecimiento de la India", aseguró el directivo en la entrevista.