El SIPRI destacó en un informe que casi todos los nueve estados nucleares -Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Corea del Norte e Israel- continuaron con programas "intensivos" de modernización nuclear el año pasado, actualizando las armas ya existentes y añadiendo versiones nuevas.
Del inventario total estimado en enero pasado de 12.241 ojivas, unas 9.614 se encontraban en arsenales militares para uso potencial; 3.912 de ellas, desplegadas con misiles y aviones; y unas 2.100, en estado de alerta máxima en misiles balísticos.
Desde el fin de la Guerra Fría, el desmantelamiento gradual de las ojivas retiradas por EE.UU. y Rusia superaba al despliegue de nuevas cabezas nucleares, pero es probable que esa tendencia se revierta en próximos años, ya que el ritmo de destrucción se ha frenado y el despliegue se ha acelerado.
"Vemos una clara tendencia de arsenales nucleares crecientes, una retórica nuclear acentuada y el abandono de los acuerdos de control de armas", escribe en su informe este instituto.
Esa nueva carrera tendría "más riesgos e incertidumbres" que la última, destaca el SIPRI, debido a la aparición de nuevas tecnologías en los campos de la inteligencia artificial, capacidades cibernéticas, defensas contra misiles y tecnología cuántica.
Entre Rusia y Estados Unidos poseen cerca del 90 % del total de armas nucleares y aunque el tamaño de sus arsenales nucleares parece haber permanecido estable en 2024, "ambos están implementando amplios programas de modernización que podrían aumentar el tamaño y la diversidad de estos en el futuro".
El SIPRI recuerda que el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START III) expira en febrero de 2026 y que si no se alcanza un nuevo acuerdo bilateral, es probable un aumento del número de ojivas desplegadas.
Las estimaciones del SIPRI apuntan a que China cuenta al menos con 600 cabezas nucleares y que su arsenal crece más rápido que el de cualquier otro país, alrededor de un centenar más cada año desde 2023.
Si mantuviese ese ritmo y alcanzase las 1.500 ojivas en 2035, esa cifra apenas supondría un tercio de los arsenales actuales de Estados Unidos y de Rusia, señala el informe.