Los choques estallaron en la localidad de Mankien Payam después de que las fuerzas de seguridad intentaran recuperar el ganado presuntamente asaltado por jóvenes armados que habían cruzado al vecino estado de Warrap, señaló el comisionado del condado de Mayom, Duer Kor Deng.
"Recibimos información de que jóvenes armados de esta zona fueron al estado de Warrap y asaltaron el ganado", declaró Deng, y añadió que "se enviaron fuerzas de seguridad para recuperar el ganado y detener a quienes generaban inseguridad entre ambos estados", ubicados en el norte del país.
Asimismo, indicó que los soldados del Ejército sursudanés rastrearon a los jóvenes armados y los siguieron hasta una zona boscosa, donde la operación se volvió violenta.
"El Ejército encontró a los criminales en el bosque y estos abrieron fuego contra los soldados de las SSPDF, matando a cinco personas en el acto e hiriendo a tres más", añadió Deng, que explicó que tres jóvenes armados murieron en el acto y dos resultaron heridos.
Después, los choques se volvieron más violentos y se elevaron a 13 los muertos, sostuvo, sin dar más detalles.
Los líderes de la sociedad civil condenaron la violencia y criticaron lo que describieron como una débil rendición de cuentas por los repetidos delitos relacionados con el robo de ganado.
Los robos de ganado son una fuente recurrente de violencia mortal en Warrap y otros estados del norte de Sudán del Sur, donde el ganado es un símbolo clave de riqueza, estatus y dote.
Las incursiones transfronterizas, a menudo atribuidas a jóvenes armados de estados vecinos, siguen socavando las frágiles medidas de seguridad en el país más joven del mundo.