Las autoridades jamaicanas lanzaron operaciones coordinadas de registro y confiscación dirigidas a altos cargos vinculados a la empresa con redadas en Saint Andrew y en Saint James.
En este contexto, los agentes pidieron a la población que "mantuviera la calma y evitara las zonas de operación en la medida de lo posible" mientras se llevaban a cabo los registros.
Las autoridades afirmaron que la operación representa un importante despliegue táctico diseñado para avanzar en la investigación y lograr una mayor rendición de cuentas en el caso de SSL.
En 2024, la Comisión de Servicios Financieros de Jamaica (FSC, en inglés) informó de que SSL pagaría alrededor de 30 millones de dólares a sus clientes, que llevan más de un año esperando cobrar sus inversiones tras un supuesto fraude masivo.
Bolt en enero de 2023 vio como su cuenta en SSL se redujo de 12,7 millones de dólares a 12.000, en un caso de fraude que afectó a decenas de clientes.
El exvelocista aseguró tras el fraude sentirse "triste y decepcionado" al perder parte de su fortuna y destituyó a su administrador financiero.
La FSC obtuvo una orden judicial en 2023 que impidió a los directores de SSL liquidar la firma de inversiones.
La empresa se vio envuelta en un fraude que superó los 3.000 millones de dólares, lo que llevó al Gobierno de Jamaica a solicitar asistencia internacional para recuperar cualquier activo o producto.
El año pasado, el Gobierno de Jamaica anunció que la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) de Estados Unidos ayudaría a los investigadores locales en su indagación sobre el presunto fraude multimillonario de SSL.