Atendiendo denuncias públicas respecto a teclados y mouses tasados en más de G. 6 millones y G. 2 millones respectivamente, la Dirección de Contrataciones Públicas emplazó por cinco días al Ministerio de Salud Pública y a la empresa Dysa Healthcare SA para que expliquen el exorbitante precio. Luego que el plazo venciera, el jueves a última hora llegó la contestación de la Secretaría de Estado a cargo de Julio Mazzoleni. La firma respondió antes. Sin embargo, los argumentos no convencieron y el director de Contrataciones, Pablo Seitz, dispuso la apertura de una investigación de oficio al respecto.
En diciembre de 2019, Salud Pública firmó contrato con Dysa Healthcare, representada por Iván Maciel y Rosalina Villalba de Paredes, para el mantenimiento con provisión de repuestos de cuatro tomógrafos y dos angiógrafos de la marca Philips. El acuerdo, por un monto máximo de G. 3.332 millones, es plurianual.
Dentro de este contrato se incluye el cambio de un teclado Dell por G. 6.860.000 y de un mouse Dell por G. 2.037.000. En el sector privado dedicado al rubro de diagnóstico por imágenes indicaron, sin embargo, que hay teclados médicos desde G. 1.024.500 y mouses desde G. 341.500. El viceministro de Salud, Julio Rolón, había admitido que Dysa y otras empresas proveedoras de equipos, les marcan el precio de referencia, para el mantenimiento de las máquinas.
El director de Contrataciones, Pablo Seitz, explicó ayer que el argumento del Ministerio de Salud y Dysa respecto al sobreprecio no es suficiente. “La información recibida no permite cerrar el caso. Por eso abrimos una investigación de oficio y analizaremos si amerita o no declarar la nulidad de esos ítems del contrato”, detalló.
“Ambos (Salud Pública y Dysa) dieron una explicación técnica general, pero nosotros vamos a verificar si el precio referencial fue bien constituido, si se tomaron en cuenta todos los parámetros que obligaba la resolución vigente en ese momento. El único elemento de negociación que tiene el Estado al momento de comprar es el precio de referencia, que indica la responsabilidad con que encaraste tu compra”, remarcó Seitz. Contrataciones no tiene indicios de que este contrato se haya ejecutado, advirtió.