Este viernes tuvo lugar una reunión entre la ministra de Trabajo, Carla Bacigalupo, y el ministro del Interior, Euclides Acevedo, en la que se anunció que esas dos carteras del Estado controlarán de forma conjunta el cumplimiento de los protocolos sanitarios de prevención de contagios de covid-19 en ámbitos laborales informales y eventos sociales.
Esta disposición fue anunciada luego de la promulgación el pasado miércoles de una nueva ley que establece el uso obligatorio de tapabocas en lugares públicos abiertos y cerrados.
La reunión fue “para coordinar acciones conjuntas de control, verificación y sanción por incumplimiento de medidas y protocolos sanitarios a través de las Direcciones Regionales de Trabajo y las unidades policiales de todo el país”, comentó la ministra Bacigalupo, citada en un comunicado del Ministerio de Trabajo.
“Debemos reforzar el modo covid de vivir y trabajar para no arriesgar más vidas ni volver atrás en la reactivación del empleo”, agregó la ministra.
Según el comunicado ministerial, se controlará el uso de tapabocas en “discotecas, restaurantes, casinos y actividades similares, también en establecimientos donde se fabriquen, depositen o manipulen productos, medicamentos o alimentos”, con penas que irían desde multas a los cierres temporales o permanentes de los comercios infractores.
El Ministerio de Salud anunció este viernes que está trabajando en la reglamentación de la ley promulgada el miércoles, y que ese proceso debería estar terminado para el próximo lunes.
Las autoridades sanitarias señalan que el promedio actual de contagios de covid-19 en Paraguay ronda los 5.000 por semana, y que un aumento de casos por encima de ese umbral podría hacer colapsar el sistema de salud del país.
Según los datos más recientes del Ministerio de Salud, Paraguay lleva confirmados más de 79.500 casos de covid-19 desde el inicio de la pandemia en marzo, con 1.704 muertes atribuidas a la enfermedad.