Niños y adultos aprovechan las últimas luces del día para pasear y tomarse fotografías con el cielo naranja como telón de fondo. No faltan las selfies interminables hasta dar con la pose correcta. Después, el movimiento se traslada a los locales gastronómicos desplegados en sitios estratégicos de la ciudad conocida como la Villa Veraniega.
Un menú variado y para todos los gustos se ofrece a los visitantes desde opciones light, pasando por hamburguesas y asados de primera calidad así como comidas al paso.
El verano se disfruta en este sitio tradicionalmente conocido por ser punto de encuentro en la temporada de verano.