UIP recibe del Gobierno jugosos contratos y “ayuda económica”

Presidentes y expresidentes de la UIP tienen contratos con el Estado por al menos G. 173.870 millones. Además, el gremio vendió un inmueble de 443 metros cuadrados al Cones, por G. 4.500 millones, tres veces más que el precio del mercado, según fuentes del sector. También recibieron “apoyo económico” por G. 9.362 millones de Sinafocal y US$ 571.657 de Itaipú. El gremio se ha convertido en el principal defensor del Gobierno.

El presidente Abdo Benítez en la inauguración de la nueva sede del Cones, con la presencia de directivos de la UIP.
El presidente Abdo Benítez en la inauguración de la nueva sede del Cones, con la presencia de directivos de la UIP.

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La Unión Industrial Paraguaya (UIP) se convirtió en la principal defensora del gobierno de Mario Abdo Benítez, fundamentalmente cuando saltan las críticas a su administración. Todo indica que esta férrea defensa se basa en que los principales directivos del gremio tienen jugosos contratos con el Estado y, además, reciben millonarias “ayudas económicas” para “capacitación”.

Pero esto no es todo, ya que también le llegaron a vender incluso un inmueble aparentemente sobrefacturado al Estado, de acuerdo con datos del sector inmobiliario. Pero comenzaremos enumerando las millonarias adjudicaciones que se “ganaron” las caras más visibles de la UIP, como por ejemplo el actual presidente del gremio, Enrique Duarte Luraghi, que con su empresa Tecmont SA ya se adjudicó contratos por G. 76.531 millones.

Esta firma, que ofrece soporte de ingeniería, adquisiciones y construcciones, especializada en el sector eléctrico, industrial y telecomunicaciones, se convirtió en la “mimada” de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE). El contrato más importante que le otorgaron es la obra de ampliación y adecuación de alimentadores del sistema de distribución en el territorio nacional (HHP0), por G. 46.500 millones (ver adjudicaciones en la infografía).

Por otro lado, el expresidente y actual miembro titular del directorio, Gustavo Volpe, con sus empresa Plásticos SA, Molecor-Titán y Luxacril, ya llegó a ganar adjudicaciones por G. 14.145 millones, principalmente de Essap y ANDE. Esto sin tener en cuenta que es el principal proveedor de cañerías en las obras del Gobierno, como subcontratista de las constructoras. Por ejemplo, provee insumos en la construcción de redes de abastecimiento de agua potable a comunidades indígenas y localidades menores beneficiarias del proyecto del acueducto del Chaco Central.

De la misma forma, el también extitular de la UIP, Eduardo Felippo, y actual miembro titular del directorio, fue beneficiado con varias adjudicaciones con sus empresas Transformadores Paraguayos SA e Ingenieros Consultores Industriales (Trafopar), cuyos contratos ya llegan a G. 83.188 millones. Duarte Luraghi, actual presidente de UIP, también figura como representante de Trafopar.

Entre los contratos que tiene Felippo se pueden citar las tres principales, que son para la adquisición de transformadores de distribución de la ANDE, por G. 25.704 millones, G. 16.628 millones y G. 28.090 millones, respectivamente, según datos oficiales.

Vendió inmueble al Cones por G. 4.500 millones

La Unión Industrial Paraguaya (UIP) también vendió al Consejo Nacional de Educación Superior (Cones) un inmueble de 433 metros cuadrados, ubicado en la calle Cerro Corá Nº 1038 del centro de Asunción, por nada menos que G. 4.500 millones. Así figura en el contrato de compraventa firmado por el presidente de la institución, Narciso Velázquez y el expresidente de la UIP, Gustavo Volpe, fechado el 17 de diciembre del año pasado.

La firma de la compra-venta se realizó dos días después de que se haya habilitado la sede propia de la institución, en este inmueble adquirido de la UIP. La habilitación contó con la presencia del presidente de la República, Mario Abdo Benítez y del entonces presidente de la UIP, Gustavo Volpe. Además, participaron miembros del Cones e invitados especiales.

Fuentes del sector inmobiliario señalaron a ABC que el Cones compró este predio de la UIP al triple del precio del mercado. El pago se dividió en tres cuotas y la institución debe pagar la totalidad en marzo del 2022 (ver facsímil del contrato).

Asimismo, ya el 26 de noviembre del año pasado, mucho antes de concretarse la compra del inmueble de la UIP, Velázquez oficializó en una resolución el trasladado sus sedes administrativas a la “nueva infraestructura edilicia con domicilio en calle Cerro Cora Nº 1038 entre EE.UU y Brasil (Asunción)”, donde actualmente se halla establecido el domicilio real de la institución.

En la inauguración Velázquez manifestó: “Este edificio como local propio para el Consejo Nacional de Educación Superior adquirido de la Unión Industrial Paraguaya representa un testimonio elocuente para fortalecer y sostener el sistema educativo mediante la sinergia entre el Estado, la comunidad académica y el sector privado”.

Millonario “apoyo” recibe de Itaipú y Sinafocal

Tanto Itaipú como el Sistema Nacional de Formación y Capacitación Laboral (Sinafocal) entregaron el año pasado millonarios recursos a la Unión Industrial Paraguaya (UIP), según informaron ambas entidades a ABC. En el caso de la binacional apoyó con US$ 571.657 al gremio en el marco del Proyecto de Fortalecimiento y Desarrollo de Microemprendedores (FDM). Dicho programa, que busca promover el desarrollo de la pymes, tuvo una duración de 28 meses y finalizó en abril de 2021.

Asimismo, en Sinafocal las transferencias a la UIP se realizan a través de la Fundación Cepprocal, que es el Centro de Productividad y Calidad con que cuenta el sector productivo, a través del cual “se realizan cursos de formación especializados con incorporación laboral solicitado por las industrias y empresas”. El año 2020 se ha transferido G. 9.362 millones al gremio para “capacitar”. Desde la institución defendieron estas transferencias, pues alegan que por medio de la ley de creación de Sinafocal “tiene incorporado dentro de su presupuesto el objeto del gasto 800, que permite realizar transferencias a organizaciones sin fines de lucro para iniciar procesos de formación profesional especializado y fortalecimiento”.

“El presupuesto del Sinafocal no es parte del tesoro público nacional; es 100% proveniente del 1% del aporte patronal, descontado a las empresas e industrias, por lo cual cuenta con un órgano rector tripartito, compuesto por los principales aportantes del Sistema, entre los cuáles se encuentra la UIP”, resaltó el ente.

También resaltaron que este año no se realizó ningún desembolso a la UIP y que todavía no se tiene previsto la firma de un nuevo convenio con el gremio, ya que los planes de formación continúan vigentes.

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