La emprendibilidad como desafío de la Reforma Joven

En adhesión al Día de los Emprendedores, que se conmemora el 28 de octubre, compartimos esta reflexión sobre la gran trascendencia y enorme responsabilidad que implica la formación de personas emprendedoras, uno de los pilares de la actual Reforma Joven, en respuesta a:

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Nuevos requerimientos de la sociedad contemporánea. Esta sociedad, denominada la sociedad del conocimiento, fuertemente afectada por el impacto del desarrollo tecnológico y científico, la globalización, y sobre todo por el aumento de la pobreza, exige a la educación que responda a tales desafíos y requerimientos mediante el desarrollo de personas de alta competencia intelectual, moralmente sólidas, con identidad y capacidad de manejar incertidumbres y adaptarse activamente a los cambios. (Fuente: Proyecto “Reforma Joven”. MEC).

El logro de egresados con este perfil, y en particular de las últimas dos competencias, requiere evidentemente el desarrollo de la capacidad emprendedora.

Emprendibilidad y el manejo de incertidumbres. La realidad actual de nuestro país, caracterizada por una alta inequidad social, que se evidencia por la desocupación, marginalidad y pobreza crecientes del mayoritario sector medio y bajo de la población paraguaya, en contraposición al enriquecimiento desmedido de una pequeña elite conformada por las familias poderosas, se traduce en la dolorosa exclusión social para muchos compatriotas. Revertir este escenario, injusto por inhumano, pero delicado en su manejo por los poderosos intereses que subyacen, requiere de una nueva generación de compatriotas que tengan la capacidad necesaria para hacerle frente con inteligencia y coraje, con fe y constancia, sin miedos ni renuncias, con suficiente mente positiva, o “buena onda”, como dicen los jóvenes. Personas con estos atributos no abundan en nuestro país, cuyo destino no puede ni debe quedar librado a su suerte, en manos de los numerosos oportunistas, especuladores y ladrones que pululan camuflados como políticos, empresarios o jueces. Necesitamos, además de los pocos quijotes de hoy, toda una nueva generación de paraguayos y paraguayas, capaces no sólo de crear y generar, sino también de probar y desarrollar ideas y proyectos de alternativa. ¡Urgimos de emprendedores!

Emprendibilidad y la adaptación a los cambios. La permanente transformación que se evidencia en diferentes sectores de la actual sociedad del conocimiento, tiene como natural contrapeso, el fenómeno de la resistencia al cambio; un sello distintivo del ser humano. Esta paradoja, que interpela en forma permanente nuestra inteligencia, precisa que la educación promueva la formación de personas con nuevas aptitudes, y sobre todo con nuevas actitudes, que hagan frente de manera exitosa a la resistencia al cambio, considerándola como una oportunidad, y no como una amenaza como muchos lo han considerado siempre y lo siguen considerando hoy. Para proponer nuevas ideas y acciones, para perfilar nuevas opciones, y para acometer los nuevos desafíos, con posibilidades ciertas de éxito, necesitamos de emprendedores!

Queridos niños y jóvenes, padres y docentes: Todos y cada uno de nosotros está llamado hoy a responder, con fervorosa entrega y plena confianza, a este llamado de la patria. De nosotros depende perfilar un futuro de grandeza o ahondar su decadencia. Nuestras acciones cotidianas demostrarán si seremos parte de la solución, o seguiremos siendo parte del problema. Conquistar la capacidad emprendedora es el desafío del momento. ¡¡Adelante, juntos podemos!!
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