Cargando...
Ingredientes
Para decorar 2 tortas
250 g de claras
500 g de azúcar
200 cc de agua
Gotas de jugo de limón
1 Colocar en una cacerola el agua y el azúcar. Calentar sobre fuego mediano, para hacer un almíbar. NO tocar. NO revolver.
2 Limpiar los bordes de la cacerola con un pincel con agua, dos o tres veces, para que no se queme el azúcar que pudiese haber quedado adherida al borde de la cacerola.
3 Verificar el punto del almíbar retirando un poco con una cuchara. Volcar sobre un platito, esperar unos segundos que baje su temperatura y formar una bolita. Esta bolita debe ser de textura blanda, lo que significa que el almíbar llegó a una temperatura de 120 ºC.
4 Verter este almíbar a punto bolita en forma de hilo sobre las claras, batiendo a velocidad mínima.
5 Una vez incorporado todo el almíbar, batir a velocidad media hasta que se enfríe por completo. Un minuto antes, echar unas gotas de jugo de limón.
6 El merengue estará a punto cuando se forme un pico en el batidor de alambre. Colocar inmediatamente en una manga de pastelería y utilizar para decorar.
Para que el merengue italiano quede bien, tiene que ser un trabajo sincronizado y sin distracciones. Una vez iniciados los dos procedimientos
(el almíbar y el batido a nieve de las claras), ninguno puede detenerse sin arruinar el resultado final. (Está mal si sale con grumos, o cortado o
directamente no se integran los preparados).
Esta variedad de merengue es la más recomendada como decoración final de las tortas.
Merengue suizo (a baño María)
Ingredientes
Para decorar 2 tortas grandes
250 g de claras
500 g de azúcar común
Gotas de jugo de limón
1 Colocar agua en una olla y llevar a fuego bajo. Esta agua, que será la base del baño María, no debe hervir.
2 Colocar las claras y el azúcar en un bol sobre el baño María.
3 Comenzar a batir lentamente para montar las claras. Las claras comenzarán a calentarse y el azúcar, a derretirse.
4 Elevar la temperatura del agua a 40 ºC para que este merengue sea apto para el consumo humano, desde el punto de vista bromatológico.
5 Retirar del baño María y terminar de batir hasta que se enfríe por completo y quede bien espumoso. Un minuto antes, agregar unas gotas de jugo de limón para que el merengue quede más blanco y para darle un toque de sabor. El merengue estará a punto cuando se forme un pico en el batidor de alambre.
Tips para convertir las claras en merengue
Los huevos deben ser frescos y estar a temperatura ambiente, y no fríos al comenzar a batir; de lo contrario, será más difícil que aumenten su volumen de forma considerable.
Al separar las claras de los huevos, tener cuidado de que no queden rastros de yema en las claras.
Unicamente las claras de huevo más limpias pueden espumarse. Los huevos, el recipiente y los utensilios deben estar impecablemente limpios. Esto quiere decir sin ningún residuo de yema, de grasa o de detergente. Tratar de batir claras con el más mínimo residuo de grasa es
como construir un castillo de naipes con el viento soplando.
Ayuda mucho utilizar una batidora eléctrica o mecánica.
Comenzar a batir las claras siempre lentamente y luego aumentar la velocidad para obtener un merengue bien espumoso.
Podemos darle color con colorante para repostería o un poco de cacao, y adicionarle nueces o almendras picadas, coco rallado o licores. Usar azúcar de mayor calidad dará mejor textura y sabor.
El merengue debe usarse de inmediato porque pierde calidad, se achica o se baja y puede volverse gomoso luego de un rato de elaborarlo.
Para decorar 2 tortas
250 g de claras
500 g de azúcar
200 cc de agua
Gotas de jugo de limón
1 Colocar en una cacerola el agua y el azúcar. Calentar sobre fuego mediano, para hacer un almíbar. NO tocar. NO revolver.
2 Limpiar los bordes de la cacerola con un pincel con agua, dos o tres veces, para que no se queme el azúcar que pudiese haber quedado adherida al borde de la cacerola.
3 Verificar el punto del almíbar retirando un poco con una cuchara. Volcar sobre un platito, esperar unos segundos que baje su temperatura y formar una bolita. Esta bolita debe ser de textura blanda, lo que significa que el almíbar llegó a una temperatura de 120 ºC.
4 Verter este almíbar a punto bolita en forma de hilo sobre las claras, batiendo a velocidad mínima.
5 Una vez incorporado todo el almíbar, batir a velocidad media hasta que se enfríe por completo. Un minuto antes, echar unas gotas de jugo de limón.
6 El merengue estará a punto cuando se forme un pico en el batidor de alambre. Colocar inmediatamente en una manga de pastelería y utilizar para decorar.
Para que el merengue italiano quede bien, tiene que ser un trabajo sincronizado y sin distracciones. Una vez iniciados los dos procedimientos
(el almíbar y el batido a nieve de las claras), ninguno puede detenerse sin arruinar el resultado final. (Está mal si sale con grumos, o cortado o
directamente no se integran los preparados).
Esta variedad de merengue es la más recomendada como decoración final de las tortas.
Merengue suizo (a baño María)
Ingredientes
Para decorar 2 tortas grandes
250 g de claras
500 g de azúcar común
Gotas de jugo de limón
1 Colocar agua en una olla y llevar a fuego bajo. Esta agua, que será la base del baño María, no debe hervir.
2 Colocar las claras y el azúcar en un bol sobre el baño María.
3 Comenzar a batir lentamente para montar las claras. Las claras comenzarán a calentarse y el azúcar, a derretirse.
4 Elevar la temperatura del agua a 40 ºC para que este merengue sea apto para el consumo humano, desde el punto de vista bromatológico.
5 Retirar del baño María y terminar de batir hasta que se enfríe por completo y quede bien espumoso. Un minuto antes, agregar unas gotas de jugo de limón para que el merengue quede más blanco y para darle un toque de sabor. El merengue estará a punto cuando se forme un pico en el batidor de alambre.
Tips para convertir las claras en merengue
Los huevos deben ser frescos y estar a temperatura ambiente, y no fríos al comenzar a batir; de lo contrario, será más difícil que aumenten su volumen de forma considerable.
Al separar las claras de los huevos, tener cuidado de que no queden rastros de yema en las claras.
Unicamente las claras de huevo más limpias pueden espumarse. Los huevos, el recipiente y los utensilios deben estar impecablemente limpios. Esto quiere decir sin ningún residuo de yema, de grasa o de detergente. Tratar de batir claras con el más mínimo residuo de grasa es
como construir un castillo de naipes con el viento soplando.
Ayuda mucho utilizar una batidora eléctrica o mecánica.
Comenzar a batir las claras siempre lentamente y luego aumentar la velocidad para obtener un merengue bien espumoso.
Podemos darle color con colorante para repostería o un poco de cacao, y adicionarle nueces o almendras picadas, coco rallado o licores. Usar azúcar de mayor calidad dará mejor textura y sabor.
El merengue debe usarse de inmediato porque pierde calidad, se achica o se baja y puede volverse gomoso luego de un rato de elaborarlo.