Monza y Verona protagonizaron un partido táctico, físico e intenso, pero en el que apenas hubo ocasiones claras. Solo un disparo entre los tres palos por cada uno de los combinados y un penalti inexistente que se inventó el colegiado -corregido al instantee por el VAR- animaron la grada del estadio de Brianteo de Monza.
Son ya dos empates seguidos de los del italiano Rafaelle Palladino que le frenan en su ascenso hacia la abierta pelea por los puestos europeos que ya tiene a 8 puntos. El Monza es undécimo con 30 unidades, marcando el ecuador de la tabla en el fútbol italiano.
En mucha peor situación esta un Verona que, pese a haber sido desvalijado en el mercado invernal, rozó el empate ante el Nápoles la pasada jornada y sacó un punto que puede ser decisivo a final de temporada.
Los del italiano Marco Baroni marchan antepenúltimos con 19, los mismos que un Udinese que tiene que jugar todavía contra la 'Juve'.