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"Las opciones de ganar eran difíciles porque había que remar mucho del último puerto a meta, pero había que estar en la fuga. No sé si pusimos en jaque al pelotón, pero se intentó", resumió el corredor madrileño, que agradeció el apoyo del público catalán "en cada subida".
Rodríguez aseguró que en el equipos Ineos Grenadiers "se vive genial" y explicó que nunca ha "dejado de rodar para volver a ganar", si bien admitió que "será difícil" porque "el ciclismo ha cambiado y se va mucho más rápido". "Se va a intentar", apostilló.
Preguntado por la etapa reina del sábado en Berga, el ciclista navarro respondió que no conoce "nada", aunque integrantes de su equipo han ido a reconocerlo y él sabe que "va a ser una escabechina". "La gente está muy cansada, veremos qué depara", opinó.