“Nunca escribimos para representar a nuestros países. Pero este es el primer Óscar para Corea del Sur. Gracias”, dijo Bong, ayudado por una traductora, a los asistentes a la gala al recibir la estatuilla a Mejor Película Internacional. La cinta ganó además Mejor Guion Original, y se convirtió en el primer filme surcoreano en ser reconocido por la Academia estadounidense como Mejor Película.
Además, Bong Joon-ho fue el ganador del galardón a Mejor Director, por sobre Martin Scorsese, Quentin Tarantino, Todd Phillips y Sam Mendes.
La sátira sobre las desigualdades sociales se había llevado la Palma de Oro en Cannes el año pasado y el Globo de Oro a mejor película extranjera recientemente. Los pronósticos de la industria la tenían como una fuerte favorita.
La película “pasará a ser una de las mejores de la historia y, sin duda, una de las más importantes”, dijo a la AFP Jason Bechervaise, profesor de la Universidad Soongsil Cyber de Corea. “Hay muchísima ira política en todo el mundo exacerbada por una sensación tangible de ampliación de la desigualdad social, y Parásitos retrata esto de manera muy efectiva”.
La película sigue a una familia de clase baja de Corea del Sur que maneja astutos mecanismos de estafa para sobrevivir y que consigue la forma de que todos sus miembros trabajen para una familia acomodada de Seúl como tutores de los hijos, chofer y ama de llaves.
Por su parte, la estadounidense Renée Zellweger ganó el Óscar a Mejor Actriz por su interpretación de la leyenda de Hollywood Judy Garland en la película biográfica “Judy”, y Joaquin Phoenix se llevó este domingo el Óscar a Mejor Actor por su aclamado papel como el villano Joker, con el que arrasó durante toda la temporada de premios.