El senador, médico y aspirante a la intendencia de Asunción, Jorge Querey, criticó la propuesta. En un comunicado, calificó el plan como una privatización de los servicios del IPS y cuestionó el daño patrimonial para la entidad.
Indicó que el monto de la tercerización ronda los US$ 100 millones pero el equipamiento necesario para suplir las necesidades ronda los US$ 10 millones.
La senadora Esperanza Martínez no acudió a la audiencia por tener dengue. El representante de la presidencia del IPS fue el consejero por el empresariado Miguel Doldán y en representación de los empresarios aportantes estuvo Gustavo Volpe.
Volpe, titular de UIP, se ganó el aplauso de los presentes al lamentar las penurias que pasan los 200 empleados de su fábrica en IPS y fustigar que la entidad privilegie los medicamentos extranjeros sobre la industria Paraguaya.
Pero recibió abucheos cuando pidió estudiar la tercerización gradual para mejorar la atención. “No defiendo ningún modelo, busco lo mejor para los trabajadores”, dijo.