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La denuncia por estafa promovida por la firma Olguiluz SA (del intendente de Carapeguá, Luciano Cañete, ANR) incluye además de a los hermanos Barrios, a Dilmia Mora Ayala (pareja de Édgar) y Porfirio Ramón Correa (socio comercial).
En el escrito presentado en el Ministerio Público y que está en poder del fiscal de Quiindy, Darío Villagra, se explica que a mediados de julio del año pasado, los dueños de la empresa referida más arriba se encontraron con la sorpresa de que los cheques de los cuentacorrentistas ahora denunciados, que ya fueron descontados e ingresaban a la Cámara de Compensación para proceder a ser efectivizados por dos entidades financieras, fueron rechazados con “orden de no pago por extravío o sustracción”, con lo que se concretó el perjuicio patrimonial a la empresa.
Olguiluz y los hermanos Barrios durante 18 meses operaron sin problema; de esta forma los denunciados ganaron la confianza de la empresa, de acuerdo a la denuncia. “Sin embargo, posteriormente con una actitud dolosa, maquinaron y denunciaron los cheques entregados a la firma como extraviados o hurtados ante la Policía Nacional, para luego procederse al bloqueo de las cuentas corrientes y finalmente causen un perjuicio de G. 1.900 millones a la empresa”, dice en el escrito de denuncia.
Lo que preocupa es la supuesta injerencia del diputado Barrios en este caso y los otros juicios que se ventilan en los juzgados del fuero civil de Paraguarí, en donde se impulsan el cobro de los cheques, que solo en el caso de la firma Olguiluz trepa a G. 1.900.000.000.
Según fuentes, hay varios otros ejecutivos contra los hermanos Barrios en los que se reclaman el cobro de diferentes montos de dinero por otras personas físicas y jurídicas que también habrían sido engañadas por los hoy denunciados.
Las mismas fuentes indicaron que la jueza Nancy Cabrera ya le otorgó a los hermanos Barrios la “privación de eficacia” de los cheques que supuestamente fueron “extraviados o hurtados”. La magistrada, para dictar esta resolución favorable a los Barrios, habría sido influenciada.
El juicio ejecutivo por el cobro de los G. 1.900.000.000 está a cargo de la jueza civil Luduvina Otazú de Mereles, que ya habría sido visitada por el diputado colorado, según nuestras fuentes.
Culpa a su pareja
Por su parte, Édgar Barrios negó que haya realizado algún tipo de transacción con la firma de Olgui Luz. “No soy comerciante, ni siquiera tengo tiempo de estar hacia ahí. Yo soy el estafado y en esto está involucrada mi pareja actual Dilma, quien fue la que retiró de dos bancos de plaza la chequera”, afirmó el denunciado.
Agregó que sobre el particular ya realizó la denuncia correspondiente contra su pareja y la misma está imputada por producción de documentos y por adulterar mi firma. “Todo este caso se está judicializando y se va demostrar que soy inocente; aquí yo soy víctima de una gran estafa fraguada en mi contra”, reiteró.