El concertista de las redes

Cuando se trata de hablar de música, Renato Bellucci deja que las cuerdas de la guitarra hablen por él. Aunque hasta en los conciertos que brinda cada noche por Facebook Live para sus fanáticos de todo el mundo no puede soslayar su profunda vocación de maestro. Cada pieza, con sus explicaciones, además del disfrute sensorial, es una ocasión de aprendizaje.

Nació en Bangkok, Tailandia, pero muy niño vino con su familia a América del Sur. “Mis padres trabajaban en la ONU en esa época. Recién a los cuatro años me llevaron a Italia”, cuenta con el acento italiano que aún conserva.

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Bellucci tenía un tío paterno que vivía en Río de Janeiro. Habían venido muchas veces en vacaciones, hasta que en una de las visitas, sus papás decidieron mudarse a Brasil. “Vivimos en Río de Janeiro por un año, pero a mis padres les decepcionó la vida en esa ciudad. Vinimos a conocer Paraguay y mis padres quedaron literalmente flechados. ¡Y yo también! Tenía 13 años recién cumplidos”, recuerda.

Afición familiar

En su casa no había músicos profesionales, pero sí aficionados. Su madre tocaba muy bien el piano y su abuelo, la mandolina. “Y fue mi abuelo, Ettore Bellucci, quien plantó la semilla de la música en mi vida. Me regaló su mandolín, el que solía usar para llevarle serenatas a mi abuela, María, cuando cumplí siete años y así este antiguo instrumento se convirtió en mi juguete favorito”, subraya. Lo que su abuelo le obsequió como distracción, se convirtió en parte de su vida.

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“No creo que mi abuelo fuera consciente de lo que estaba gestando en ese momento con ese regalo”. Aquella mandolina lo conquistó por completo. Entonces sus padres decidieron regalarle algo lo más parecido posible para estudiar en el conservatorio: una guitarra. Bellucci tenía 14 años, y del juego, la música se convirtió en una pasión.

Estudios y profesión de Renato Belucci

Inició sus estudios con el maestro italiano Vincenzo Calsolaro a los ocho años en Taranto, Italia. “Fue mi primer maestro y el que me hizo amar y respetar la guitarra y el estudio intensivo del instrumento”, revela. Afortunadamente, desde el principio, sus padres lo apoyaron en un 100%. “Una carrera musical sin apoyo incondicional de los padres y de los amigos es prácticamente imposible. Y eso de que en Paraguay no se vive de la música es un mito. Paraguay es uno de los mejores países para un músico, especialmente desde los años 90 cuando internet hizo su aparición”.

Bellucci ha vivido en siete países y afirma que esto lo ha hecho fácilmente adaptable, pero desde que llegaron los nietos, las posibilidades de vivir permanentemente en otro país son muy remotas. Y, aunque recorrió el mundo, encontró el amor en una paraguaya. “Estoy casado con Belén Angulo y en los 31 años de matrimonio hemos sido bendecidos con ocho hijos. Ahora se van sumando los nietos: Piero y Mauro son los primeros”.

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Además de intérprete y maestro de guitarra, Bellucci también es lutier. Y se inició en la lutería de forma muy inesperada. Fue gracias a un pedido de sus alumnos de Estados Unidos acerca de la posibilidad de hacerles construir una guitarra de concierto de nivel profesional y a un precio accesible: “Me puse a investigar y poco tiempo después estaba exportando la primera de casi 2.000 guitarras de concierto que hemos construido hasta la fecha”.

Los conciertos por Facebook

El concertista asegura que la idea de realizar sus actuaciones en vivo por Facebook y YouTube nació de forma inesperada cuando acababa de retornar de unas presentaciones en los Estados Unidos, que se habían transmitido en vivo por las redes. Esto le hizo pensar que hacerlo regularmente sería muy factible si se considera que salir en vivo hoy en día es relativamente fácil. Además, no tenía en vista ningún concierto a corto plazo ni nada que lo entusiasme. Con su esposa, Belén, fueron hilando las ideas y esa misma noche dio un concierto en vivo por YouTube. El ciclo comenzó cinco meses antes de la pandemia.

“Desde entonces, realicé más de 500 conciertos que fueron presenciados por cerca de dos millones de personas”, resalta.

Sus expectativas sobre su audiencia eran muy buenas porque considera que es la nueva forma de hacer música en vivo y se puede acceder a personas que jamás fueron o irían a un concierto. “Hubo varias ocasiones en las que me veían desde 18 países en simultáneo y con un público de todas las edades. Además, al poco tiempo de iniciar el ciclo de conciertos, se vino la pandemia y eso multiplicó los números exponencialmente”, detalla y agrega que lo considera la mejor sorpresa en su carrera de las últimas décadas. ¡Bravo!

Una biografía de Renato Belucci

Renato Bellucci nació en Bangkok, Tailandia, el 17 de diciembre de 1961. Inició sus estudios de guitarra a los ocho años en Taranto, Italia, con el maestro Vincenzo Calsolaro. Su debut ante el público fue en 1970 en el Teatro Piccinni, de Bari, Italia. Cuando su familia se mudó al Paraguay, completó sus estudios de conservatorio con el maestro Felipe Sosa, graduándose con honores en 1980. Como resultado del Primer Premio del Concurso Agustín Barrios en 1982, Bellucci obtuvo una beca para estudiar con el maestro Andrés Segovia en Madrid. De 1983 a 1986 asistió a clases magistrales con Sila Godoy, Narciso Yepes, Andrés Segovia, José Tomás, Ernesto Bitetti, Alirio Díaz, David Russell y Eliot Fisk. Estudió en Uruguay con Abel Carlevaro, y en Londres con Bernard Oram en el Guildhall School of Music and Drama en 1988. Realizó extensas giras durante fines de la década de los 80 y principios de los 90, recibiendo las más elogiosas críticas de más de 20 países. Ha producido cuatro CD y un DVD de guitarra. Enseña en Asunción, y a través de su sitio web, a más de 2000 alumnos en prácticamente cada país del mundo. En el 2004 creó su marca de guitarras clásicas, Bellucci Guitars. Trabajando con algunos de los mejores lutieres del Paraguay, estableció su marca como los instrumentos más deseables de la comunidad guitarrística. El Congreso Nacional le otorgó el prestigioso Premio República por sus logros en la difusión de la música del maestro Agustín Barrios Mangoré y por promover la lutería artesanal en el Paraguay.

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