La fertilidad en el siglo XXI, esperanza y ciencia

En la actualidad, cada vez son más frecuentes los problemas de fertilidad en la población. Con el objetivo de llamar la atención sobre este tema e incentivar las consultas en el momento indicado con un especialista es que el 4 de junio se celebra el Día Mundial de la Fertilidad.

Muchas parejas logran ser padres gracias a la ciencia cuando no pueden concebir de manera natural.
Muchas parejas logran ser padres gracias a la ciencia cuando no pueden concebir de manera natural.

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La infertilidad es una enfermedad del aparato reproductivo femenino o masculino que imposibilita conseguir un embarazo luego de un año de relaciones sexuales sin protección, según lo define la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“Un reporte reciente de la organización revela que la prevalencia del problema es aún mayor a la que teníamos anteriormente. Según ese estudio, se estima que el 17,5% de las personas en edad reproductiva tiene infertilidad. Eso significa que prácticamente una de cada seis personas tiene un problema de fertilidad”, explica el Dr. Roger Molinas, especialista en Medicina y Cirugía reproductiva, director de la Clínica Neolife y vicepresidente de Red Lara Región Cono Sur.

Según este reporte, en la región de las Américas, y entre ellos el Paraguay, estas cifras son muy similares. “La OMS dice que en esta región el 10% de la población en edad reproductiva tiene infertilidad en este mismo momento y que un 20% de la población ha tenido infertilidad en algún momento de su vida”, reseña el especialista.

Los problemas de fertilidad en mujeres pueden ser la falta de ovulación o mala calidad de los óvulos; endometriosis; fibromas uterinos o trompas de Falopio bloqueadas.

En el caso de los hombres, la causa de infertilidad puede deberse a bajo recuento de espermatozoides en el semen o ausencia de ellos; baja movilidad de los espermatozoides; espermatozoides que no se han formado adecuadamente; semen espeso que no permite llegar a los espermatozoides al óvulo; problemas hormonales y problemas de eyaculación.

Los buenos hábitos, como una dieta sana y equilibrada, no fumar, moderación con el consumo de alcohol, practicar un deporte y evitar el estrés, ayudan a mejorar la fertilidad.

En caso de llevar demasiado tiempo tratando de concebir, lo mejor es acudir a un especialista, para un estudio de fertilidad y hacer un seguimiento hasta llegar al embarazo y su buen término.

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