Laguna con yacarés, un atractivo

Itá cuenta con un atractivo único: una laguna urbana donde se pueden apreciar yacarés. El acceso se encuentra sobre la ruta departamental denominada D027 (ex Ruta 1 Mariscal Francisco Solano López) y a 200 metros del templo parroquial erigido en honor de San Blas y que es de origen franciscano.

La Laguna Itá es un sitio muy visitado por los turistas.  Actualmente 31 yacarés habitan en el espejo de agua.
La Laguna Itá es un sitio muy visitado por los turistas. Actualmente 31 yacarés habitan en el espejo de agua.Archivo, ABC Color

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La conocida como Laguna Itá está rodeada de un cercado perimetral para evitar algún eventual ataque de los reptiles a las personas que llegan al sitio. Sin embargo, tras las intensas lluvias se produjo el desborde del espejo de agua y el vallado sufrió desperfectos, lo que permitió la salida de algunos de los 31 yacarés en dos ocasiones.

Los reptiles se pasearon por el casco urbano, pero luego fueron rescatados y devueltos a su hábitat.

Los yacarés salen a buscar comida, ya que las raciones que se les suministran ya no son suficientes. En un principio eran dos o tres ejemplares y ahora son más de 30, resaltaron algunos pobladores de la zona urbana.

En el perímetro se pueden observar carteles alusivos a la laguna y a la presencia de yacarés como una advertencia para que los visitantes tengan cuidado al compartir el espacio público.

Algunos pobladores comentaron que en la época de la Guerra contra la Triple Alianza o Guerra Grande (1864-1870), los soldados que pasaban por ese lugar pedían agua a una anciana que habitaba el lugar. Había un pozo, pero la mujer se negaba a darles el vital líquido a los sedientos soldados y a todo aquel que le solicitaba, por lo que como “castigo divino” supuestamente hubo un diluvio que inundó toda su vivienda hasta formar una laguna.

Otra versión refiere que dentro de la laguna fue enterrada una campana de oro para que los invasores de la época de la contienda con Brasil, Argentina y Uruguay no se la llevaran como trofeo de guerra.

Otro atractivo del distrito es el templo erigido en honor del protector San Blas a unos 200 metros de la laguna. Según los datos, fue construido con materiales rescatados de la primera capilla de origen franciscano con la que contó la comunidad y que estaba ubicada en el mismo sitio donde se levantó la actual iglesia.

En el travesaño de la nave central tiene grabado en latín: Esta casa del Señor fue edificada en 1698″.

La artesanía de cerámica de Itá es un importante atractivo, generador de ingresos y emblema de la comunidad.

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