El bajista Carlos “Tody” Tapia, quien conforma Turf junto con Joaquín Levinton, Leandro Lopatín, Nicolás Ottavianelli y Fernando Caloia, habló con ABC Color sobre esta situación que atraviesan ahora con la banda, y también del Festival Online Cosquín Rock que los volverá a juntar luego de no verse desde febrero.
“Lo que va a pasar el 9 de agosto va a ser muy fuerte porque vamos a volver a estar los cinco en un mismo lugar, va a estar buenísimo”, expresó el bajista, quien también contó que en todo este tiempo trataron de no parar en cuanto a composición y grabación. En su caso personal, también pudo dedicarle más tiempo a su proyecto paralelo, la banda El Club del Rifle.
Para Turf, este parón obligatorio es una situación sobre todo de responsabilidad de los actos de cada uno, para evitar el contagio masivo. Asimismo, señaló que es la primera vez desde la separación voluntaria que tuvieron, que pasan tanto tiempo sin estar juntos.
“Nosotros estamos juntos desde el 95. Después tuvimos ese parate que fue decisión nuestra, que fue muy sano. No me arrepiento de haber tomado la decisión, como quinta parte de la banda, porque gracias a eso podemos estar ahora de nuevo como personas más maduras, y gracias a eso podemos tocar hasta que nos den las manos. Yo creo que hay Turf para rato”, indicó Tapia.
“Una banda es muy parecida a lo que es una pareja pero con más personas, es poliamor”, dijo entre risas, reflexionando sobre ese tiempo en que decidieron tomar caminos separados. “En la banda es como que sos compañero de trabajo, sos tu mejor amigo, psicólogo, sos muchas cosas, más en un grupo como el nuestro. Eso nos une como personas hasta antes que músicos. Por eso la dinámica se mantiene intacta, y además nos gusta mucho investigar diferentes ritmos musicales, y una vez que alguien trae una idea, al juntarnos los cinco a tocarla es inevitable el sello de Turf”, remarcó sobre el toque personal que dan a sus creaciones.
Al regresar como banda, dijo, se dieron cuenta de que ya se habían “convertido en una banda clásica, como muchas de las que empezaron a mediados de los 90”. También afirmó que cuando fueron conociéndose con las nuevas bandas, muchos músicos les expresaban que escuchaban su música “cuando estaban empezando a tocar un instrumento”. “Eso es muy lindo, significa que algo hiciste, dejaste una huella”, pensó.
“Loco un poco”, “Pasos al costado”, “Magia blanca”, “Yo no me quiero casar ¿y usted?” fueron, entre otros, varios de los temas que hicieron trascender a la banda, incluso a veces “las canciones son más grandes que la banda”, bromeó Tapia al recordar el recorrido de su trayectoria, donde Paraguay estuvo muchas veces en el mapa, desde telonear un show a Charly García en 2002, hasta el festival Asunciónico, en 2018, entre muchos otros eventos.
También en este periodo, lanzaron un concurso de reversiones de sus temas, y Tapia afirmó que se llevaron una gran sorpresa al escuchar “versiones que no podés creer, que no se nos hubieran ocurrido”. En ese sentido, destacó que el poder de cualquier canción es el de unificar familias, amigos, parejas. “Todos tenemos canciones que te hacen acordar puntualmente a años de tu vida o a cosas que viviste, etapas en las que estabas. La música va pegada al día a día, a vivir. Como el perfume o los libros”, resaltó.
Actualmente, el grupo está a la espera de retomar la grabación de su nuevo disco, del que hace poco lanzaron el single “Voy dejando atrás”. Pensando en la letra, el músico reflexionó que de todo lo que vivió, no se arrepiente de nada, pero que sí extraña estar con la gente. “Es esa cosa que sobre todo tenemos los argentinos, los sudamericanos, de saludarse, juntarse. Esso stá faltando y mucho. Espero que podamos volver, aunque cuesta entender esa nueva normalidad de la que tanto hablan”, concluyó.