Wagner Moura: Vivir en el Brasil de Bolsonaro "es un acto revolucionario"

Nayara Batschke Sao Paulo, 1 nov (EFE).- "Vivir en Brasil es un acto revolucionario". Así define la situación de su país el actor Wagner Moura, quien debuta detrás de la cámara con "Marighella", una cinta cuyo estreno llega con dos años de retraso debido a la "censura" y "violencia" del Gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro.

https://cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/abccolor/RDTHL4OYQND2BPQ2OWA2WKLKF4.jpg

Cargando...

Tras dar vida a icónicos personajes, como el capo Pablo Escobar en la serie "Narcos" o el Capitán Nascimento de "Tropa de Elite", ganador del Oso de Oro 2008, Moura se alza ahora a la dirección al recuperar la historia de Carlos Marighella, político, revolucionario y uno de lo principales organizadores de la lucha armada contra la dictadura militar que gobernó Brasil entre 1964 y 1985.

Pero el camino para que llegara a la gran pantalla estuvo marcado por la censura y amenazas -"tan características del fascismo"- por parte de militantes ultraderechistas e incluso del propio presidente y su familia.

"Es una película que fue muy atacada desde el inicio. Desde cuando surgió la idea de hacerla, pasando por la financiación, el rodaje y, después, ya en el primer año del Gobierno Bolsonaro, por el impedimento de lanzarla", explica el director en una entrevista con Efe en Sao Paulo.

"Marighella" se estrenó en el Festival de Berlín en febrero de 2019 y su lanzamiento en Brasil estaba previsto para finales de aquel mismo año, pero una serie de divergencias con la Agencia Nacional del Cine (Ancine), vinculada al Gobierno, hizo que se retrasara en más de dos años.

"No tengo la menor duda que 'Marighella' fue censurada, era un momento en que Bolsonaro hablaba abiertamente sobre poner filtros en la Ancine. Los hijos de Bolsonaro fueron inmediatamente a Twitter para celebrar las negativas" de Ancine para el estreno, recuerda Moura.

Así, el actor y director es tajante al afirmar que su ópera prima "no es una película sobre quienes resistieron a la dictadura militar", sino sobre "quienes están resistiendo ahora ante este Gobierno trágico".

"Tú no estás obligado a que te guste Marighella, puedes no estar de acuerdo, discutir, vamos a debatir. Pero la interdicción es una característica del fascismo, que es ese Gobierno", subraya.

En más de dos horas y media, el film, con preestrenos en cines de todo Brasil a partir de este lunes, narra los últimos cinco años de vida de Marighella, desde 1964, cuando los militares tomaron el poder en un golpe de Estado, hasta su violenta muerte durante una emboscada el 4 de noviembre de 1969.

Para Moura, el paralelismo entre el Brasil militar de hace cinco décadas y el actual es "bastante evidente".

"Se abrió la puerta del autoritarismo, de la violencia, del racismo. Cuando hay en la Presidencia de la República una persona que es abiertamente autoritaria, nostálgica de la dictadura militar o que tiene como héroes a torturadores, es obvio que la historia de Marighella es un problema para ellos", asegura.

El actor, por otro lado, nunca tuvo miedo. Ni ante la censura explícita, ni en medio de las campañas virtuales en su contra, ni cuando militantes bolsonaristas amenazaron con invadir el estudio de filmación.

"Ellos son muy frágiles. En todos los sentidos, intelectualmente, además son muy cobardes. Y la fuerza moral de la historia de Marighella y la nuestra se impone a esta gente. Entonces no, no tengo miedo", recalca.

No participar, agrega, en el enfrentamiento a esa política de "destrucción" no sería "coherente" con el actual "momento de lucha por los derechos y la democracia" y, sobre todo, con la historia del propio Marighella.

"En medio de tanta violencia, también estamos recibiendo mucho amor", celebra.

Pero Moura sí considera que vivir en Brasil, un país devastado por el hambre, la persecución histórica de minorías y más de 600.000 muertos por la covid, es "un acto revolucionario".

"Los artistas fuimos desde el inicio de este Gobierno atacados de forma muy cruel, pero eso es característico del fascismo. Así como los ataques al periodismo, a todo que se refiere al pensamiento crítico, a las universidades, a la ciencia", afirma.

Sobre las controversias que rondan la figura que eligió para retratar en su debut detrás de las cámaras, Moura sostiene que Marighella solo es "polémico" para las personas que "se opusieron a la lucha de los brasileños contra un régimen opresor".

"Marighella es un personaje de su tiempo. Quien no hace parte de su tiempo es Bolsonaro. Bolsonaro sí es un personaje anacrónico", remata.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...