JERUSALÉN (EFE). Kushner, pieza clave en la Casa Blanca del presidente de EE.UU, jugó un importante papel como mediador para que Emiratos Árabes Unidos, Baréin, Sudán y Marruecos establecieran vínculos oficiales con Israel en los últimos cuatro meses, su principal logro en esa conflictiva región, tras trabajar largo tiempo en un plan de paz para palestino-israelí.
El asesor presidencial y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, exhibieron su sintonía en una rueda de prensa conjunta en Jerusalén, en la que hicieron balance de lo conseguido durante el mandato de Trump.
Estos años, pese a “los complicados desafíos” que enfrentaron, juntos pudieron “crear un nuevo marco” de relaciones “que ha generado mucho progreso para Israel y el mundo entero”, dijo Kushner a Netanyahu, antes mantener ambos una reunión bilateral.
Más allá “de las sensaciones positivas, lo que importa son los resultados, y creo que juntos logramos algunos resultados históricos”, añadió.
“Nos centramos en proseguir con los intereses comunes de nuestros países, abordamos lo que eran problemas aparentemente irresolubles” y “usamos el sentido común”, valoró Kushner.
Netanyahu –que entregó una placa de agradecimiento a Kushner– destacó que este fue el primero en tener “éxito” entre “innumerables personas de diferentes países” que durante décadas “trataron de promover la paz en Oriente Medio”, y elogió su contribución y la de Trump para “la normalización de relaciones de Israel con el mundo árabe y musulmán”.
“Paz con Emiratos Árabes Unidos, Baréin, Sudán y ahora Marruecos”, celebró Netanyahu, que reiteró que pronto “habrá más” pactos con otros países.
Camino a Marruecos
Kushner llegó ayer a Israel junto con una delegación de altos cargos de EE.UU. para una breve estancia previa a su viaje, hoy, a Marruecos, donde acompañará a una representación israelí encabezada por el asesor de Seguridad Nacional, Meir Ben Shabat.
Harán una visita histórica en la que tratarán el establecimiento de vínculos diplomáticos con las autoridades marroquíes, un proceso que ambos países quieren hacer rápidamente para estrechar sus relaciones.
El viaje de la delegación estadounidense-israelí será el primer vuelo comercial directo entre Tel Aviv y Rabat, y estará operado por la aerolínea israelí El AL.