Pelosi advirtió el año pasado de que el Reino Unido tendrá dificultades para lograr un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos si rompe el protocolo para Irlanda del Norte pactado con la Unión Europea (UE) como parte del acuerdo del Brexit, un asunto que preocupa especialmente a la administración del presidente Joe Biden.
Por ahora, el Reino Unido ha rehusado aplicar los controles aduaneros en la región que se comprometió a llevar a cabo y los ha pospuesto "sine die" al considerar que crearían demasiadas fricciones en su mercado interno.
En su encuentro de hoy, Johnson trasladó a Pelosi sus "preocupaciones sobre el modo en el que el protocolo se está implementando y el impacto que esto está teniendo en las personas de Irlanda del Norte", señaló un portavoz de Downing Street.
Ambos "estuvieron de acuerdo en la importancia de mantener la paz" en la región, agregó esa fuente.
El jefe de Gobierno y la presidenta de la Cámara de Representantes subrayaron al mismo tiempo la solidez del vínculo entre Londres y Washington.
Esa fortaleza ha quedado ejemplificada con el anunció del pacto de defensa AUKUS, que une al EE.UU., el Reino Unido y Australia en cuanto a su estrategia en el Indo-Pacífico, así como en la "reciente cooperación" en la evacuación de tropas de Afganistán, detalló el portavoz de Johnson.
El primer ministro trasladó asimismo a Pelosi en su encuentro que lograr el "éxito" en la cumbre del clima COP26 que se celebrará en noviembre en Glasgow (Escocia) es un "imperativo económico, de seguridad y moral".