"En Jordania acogemos a un millón de refugiados sirios, y les brindamos todos los servicios humanitarios, sanitarios y educativos (...) Lo hacemos en nombre de la comunidad internacional, que tiene que afrontar las consecuencias del asilo a los refugiados en los países que los acogen", sostuvo.
El monarca de la nación árabe, de 11 millones de habitantes y donde también viven 2,3 millones de refugiados palestinos, destacó también que el tráfico de armas y drogas que trata de combatir en sus fronteras "se ha convertido en una amenaza para toda la región".
Abdalá II indicó que para afrontar las consecuencias económicas de la pandemia de coronavirus y de la guerra entre Rusia y Ucrania, la región de Oriente Medio está empezando a explorar las oportunidades para "una integración regional en los sectores de energía, agua y seguridad alimentaria".
Sin embargo, "para asegurar el éxito de esas asociaciones, tenemos que incluir nuestros hermanos del Gobierno de Palestina", afirmó el monarca, que reiteró su llamamiento para una "solución justa e integral para el asunto palestino en base a una solución de dos Estados".