La operación Yolcos comenzó en La Coruña (noroeste) en junio de 2021, cuando los agentes detectaron a varias personas que recibían en sus cuentas bancarias dinero procedente de transferencias fraudulentas efectuadas por la organización criminal en varias partes del país.
Posteriormente lo retiraban bien de cajeros automáticos o en las propias entidades financieras y lo entregaban a un "captador", por lo que recibían un porcentaje de la cantidad.
Estas personas -denominadas 'mulas' o 'drops'- eran mujeres jóvenes captadas por los miembros de la banda, tras haber mantenido relaciones sentimentales con ellos.
Los captadores se aprovechaban de la relación de pareja y las embaucaban para que les facilitaran el acceso y control de sus cuentas bancarias a cambio de cantidades económicas para recibir el dinero procedente de cuentas a las que habían accedido ilegalmente.
Los hombres que hacían de captadores eran seis varones, todos de origen sudamericano, con múltiples antecedentes policiales, y residentes en Ferrol (La Coruña).
Según informó este sábado la Guardia Civil española, todos actuaban a las órdenes de un cabecilla brasileño, que hacía de nexo con una organización internacional criminal que dirigía estas actividades ilícitas.
Los detenidos pasaron a disposición judicial, mientras que otros cinco sospechosos huyeron a sus países de origen, Brasil y República Dominicana, para los se que se han solicitado órdenes internacionales de detención.