"Muchos rohinyás han sido detenidos. Después de las pesquisas, hemos enviado a 32 personas al tribunal el viernes. Otras 13 serán enviadas hoy", indicó a EFE el jefe de policía de Cox's Bazar, Mahfuzul Islam.
El operativo de seguridad, que comenzó a la medianoche del jueves y continuó hasta ayer, fue coordinado por una unidad del Batallón de la Policía Armada (APBN) responsable de la seguridad en varios campamentos en el área de Ukhiya de Cox's Bazar, denominado "Operación Root Out" (erradicación).
La operación se llevó a cabo "debido al aumento reciente de la cantidad de delitos en los campamentos. Otras dos unidades de la APBN y la policía del distrito también se unieron al operativo", según el portavoz policial Faruk Ahmed.
Al menos 41 rohinyás fueron detenidos, incluidos seis sospechosos de asesinato, precisó.
Para la acometida de seguridad, las fuerzas bangladesíes acordonaron el área del campamento para evitar que algún sospechoso huyera de la zona.
La operación se produjo solo un día después de que dos rohinyás murieran tiroteados en uno de los campamentos.
Los dos homicidios ocurridos el pasado jueves elevaron el número de asesinatos a ocho en lo que va de mes, el más alto en los últimos meses.
Al menos 12 refugiados rohinyá, incluidos varios líderes comunitarios, fueron asesinados entre julio y septiembre.
Un líder de la Sociedad Arakan Rohingya para la Paz y los Derechos Humanos, que se encuentra bajo custodia de protección, dijo a EFE a principios de este mes que el grupo rebelde Arakan Rohingya Salvation Army (ARSA) podría estar detrás de los recientes asesinatos, con el objetivo de bloquear el proceso de repatriación de los rohinyá.
El ARSA es acusado de haber llevado cabo una serie de ataques en 2017 en la provincia norteña de Rakhine en Birmania (Myanmar), lo que provocó una brutal campaña de represalia del Ejército birmano que llevó a alrededor de 774.000 rohinyás a huir a Bangladesh.
La policía de Bangladesh ha atribuido el reciente aumento de la violencia en los campos de refugiados al regreso de elementos criminales tras las tensiones fronterizas con Birmania.