Tras varios intentos infructuosos de reapertura en los últimos meses, las discusiones entre el Gobierno talibán y la OCI culminaron con la vuelta a la actividad de la organización en la capital afgana desde esta mañana, dijo a EFE el portavoz adjunto del Ministerio de Exteriores de los talibanes, Hafiz Zia Ahmad.
El ministro de Exteriores talibán, Amir Khan Muttaqi, calificó este hecho de "éxito político y diplomático".
Muttaqi aseguró el pasado fin de semana, durante los actos previos a la reapertura, que la presencia de la OCI facilitará la llegada y la gestión de la ayuda humanitaria procedente de los países islámicos.
El ministro aprovechó la ceremonia, a la que asistieron representantes de la Unión Europea y de la misión de la ONU en Afganistán, para pedir un aumento de la inversión en el país al resto de naciones islámicas, a las que garantizó la seguridad de sus embajadas y edificios diplomáticos.
"Afganistán es un buen centro para la región en términos de tránsito”, sentenció.
La sede de la OCI en Kabul cerró sus puertas después de que los fundamentalistas tomaran Kabul en agosto de 2021. Pese a que la organización anunció el pasado marzo su intención de volver para ayudar a atajar la crisis humanitaria que ahoga al país desde la llegada de los talibanes, no ha logrado culminar su objetivo hasta ahora.
Esta crisis requiere el apoyo de la comunidad internacional y especialmente de los países islámicos, afirmó el representante especial de la OCI para Afganistán, Tariq Ali Bakheet, tras reunirse con Muttaqi.
“El apoyo político a Afganistán proporciona seguridad y estabilidad duraderas; Afganistán está en crisis y requiere el apoyo y la cooperación de todos los sectores. Para ello, hemos creado un fondo para ayudar a Afganistán”, dijo Bakhett en Twitter.
Durante su encuentro con el ministro también debatió el establecimiento de la Universidad Islámica Internacional en Afganistán por parte de la OCI y el reinicio del proceso de selección de Kabul como la capital cultural de los países islámicos para 2024, informó el Ministerio de Exteriores afgano.
La capital afgana había sido designada en 2019 por la OCI como la capital cultural de los países islámico para 2024, pero la llegada al poder de los fundamentalistas en Afganistán truncó esa opción.