"Un ciudadano que fue alcanzado por balas reales en el pecho sucumbió a sus heridas críticas en la ciudad de Yabad", indica un comunicado del ministerio palestino de Sanidad.
A plena tarde, los soldados irrumpieron en esa zona cercana a Yenín, donde proliferan milicias palestinas, para rodear una casa y exigir a sus habitantes que se entregaran, desatando un enfrentamiento armado con milicianos locales, informó la agencia oficial de noticias palestina, WAFA.
Por su parte, el Ejército confirmó su operación "antiterrorista", durante la cual detuvo a Aha Ani Harzallah, "quien ya había sido encarcelado en dos ocasiones y es sospechoso de haber realizado actividades terroristas recientemente".
"Se lanzaron artefactos explosivos en la zona y sospechosos armados dispararon contra los soldados, que respondieron con fuego real", añadió el Ejército, cuyas tropas no registraron lesionados.
Durante la operación, los uniformados localizaron un rifle M-16, un chaleco militar y cerca de 15.000 dólares presuntamente destinados a actividades terroristas.
El martes, cinco palestinos murieron y una soldado israelí resultó herida en cuatro incidentes violentos distintos en Cisjordania ocupada, en uno de los días más sangrientos en lo que va de año, el más mortífero en Cisjordania desde 2006.
La violencia se disparó a finales de marzo: varios ataques mortales cometidos por palestinos y árabe-israelíes hicieron que Israel respondiera con su operación "Romper la ola", que consiste en violentas redadas militares casi cotidianas en Cisjordania ocupada, sobre todo en la región de Yenín y Nablus.
En lo que va de año, 156 palestinos han muerto -muchos milicianos, pero también civiles y menores- en eventos violentos, según el Ministerio de Sanidad palestino, mientras que del lado israelí 29 personas perdieron la vida, 21 de ellas civiles.
Las autoridades israelíes han detenido a unos 3.000 palestinos "sospechosos de terrorismo", frustrado más de 500 ataques y se han incautado de unas 250 armas, solo en lo que va de año.