El ministro interino del Interior, Ivan Demerdzhiev, dijo después del Consejo Europeo del ramo que su país avanza por la senda correcta y espera poder vencer las reticencias de esos dos países en los próximos meses.
"Nada está perdido, al contrario, estamos en el camino correcto y hemos hecho lo que se espera de nosotros. Las conversaciones continúan, somos positivos y trabajaremos para encontrar un compromiso para que los dos países que mantienen reservas hoy estén de acuerdo", señaló el ministro búlgaro.
"Creo que dentro del próximo año podemos lograr un resultado positivo", agregó Demerdzhiev.
El ministro búlgaro diferenció las posiciones de Austria, que consideró más pragmática, de la de Países Bajos, que criticó por no establecer ningún criterio a su veto y calificó su decisión de "política".
"La Haya no tiene argumentos concretos para nuestras acciones e inacciones", sostuvo Demerdzhiev, que recordó que 25 países miembros y la Comisión Europea apoyaron el ingreso de Bulgaria en Schengen.
El Consejo de Interior de la Unión Europea (UE) decidió hoy en Bruselas admitir a Croacia en Schengen y dejar fuera a Bulgaria y Rumanía.