“Estoy profundamente alarmado y entristecido por el continuo ciclo de violencia en Cisjordania”, aseguró el representante de Naciones Unidas, que agregó que la muerte de nueve personas, entre los que había milicianos y una mujer anciana, es otro “claro ejemplo” de la difícil tensión que se vive en el terreno desde hace tiempo.
Según apuntó, desde inicios de 2023 sigue habiendo “altos niveles de violencia y otras tendencias negativas que caracterizaron 2022”.
El año pasado, 170 palestinos -parte de ellos milicianos, pero también civiles desarmados- murieron en incidentes violentos por fuego israelí. En lo que va de año actual, contando los palestinos muertos hoy, ya son 29 las víctimas mortales en Cisjordania ocupada.
“Es fundamental reducir las tensiones de inmediato y evitar más pérdidas de vidas”, enfatizó Wennesland, que reiteró su “compromiso activo con las autoridades israelíes y palestinas para aplacar tensiones, restaurar la calma y evitar más conflictos”.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) calificó el operativo de hoy en Yenín de “masacre” y convocó tres días de luto y muchos lugares en Cisjordania se pusieron en huelga.
En la Universidad de Bir Zeit, principal centro universitario palestino en Cisjordania, los estudiantes pararon las clases para expresar su malestar y salieron a protestar.
En el centro de la ciudad de Ramala, comercios, oficinas o centros institucionales cerraron sus puertas, según pudo presenciar Efe.
Las fuerzas israelíes habían entrado esta mañana en el campo de refugiados de Yenín para arrestar a un escuadrón armado del grupo Yihad Islámica que, según fuentes militares, había cometido ataques con disparos contra objetivos israelíes y planeaba más acciones.
Su incursión derivó en fuertes enfrentamientos armados y graves daños materiales en inmuebles del área.
Según medios locales, El Ejército israelí se ha puesto en alerta ante la posibilidad de que las milicias palestinas de Gaza decidan lanzar cohetes como acción de represalia.
De acuerdo con un comunicado del Ministerio de Defensa de Israel, el ministro, Yoav Galant, está recibiendo ahora actualizaciones sobre la situación sobre terreno y “pronto realizará una evaluación” para plantear cómo actuar con el resto del aparato militar.