"Esta visita de alto nivel, la primera de este tipo de un Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia a nuestro país, está en consonancia con la elección política realizada por el Gobierno de Transición de ampliar y diversificar las asociaciones estratégicas", explica la nota.
Asimismo, añade que esta visita, que durará dos días, refleja la voluntad de los dos Jefes de Estado maliense y ruso de crear una nueva dinámica en las relaciones bilaterales en los sectores de defensa y seguridad, así como en la cooperación económica, comercial y cultural.
Lavrov llega a Bamako en un contexto preocupante para Mali, cuyo acercamiento a Moscú es fuertemente criticado por la comunidad internacional.
De hecho, la ONU, Francia y expertos en derechos humanos acusan al Ejército maliense y a mercenarios rusos del grupo Wagner, que operan en el país africano, de perpetrar abusos contra los civiles a través de informes que el gobierno de Mali rechaza.
Mali está gobernado por una junta militar después de dos golpes de Estado liderados por el coronel Assimi Goita, que se negó a convocar elecciones el pasado febrero, como prometió, y ofreció celebrarlas en febrero de 2024.
Asimismo, el país es escenario del ascenso de los grupos yihadistas que perpetran ataques contra blancos militares y la población civiles, causando víctimas mortales y provocando flujos de desplazados.
El Gobierno de Mali ha limitado cada vez más la capacidad de operación de la misión de la ONU en el país (Minusma), al tiempo que cuenta con el apoyo del grupo de mercenarios Wagner, ligado al Kremlin.