Pese a las persistentes lluvias, la cita atrajo a una gran muchedumbre, sobre todo de kurdos residentes en la ciudad, y se desarrollaba en un espíritu festivo entre canciones, bailes y los tradicionales saltos por encima de un fuego.
Como es habitual en los últimos años, también tuvo una fuerte componente de protesta contra el presidente turco, el islamista, Recep Tayyip Erdogan y su gobierno, con gritos de "Dimisión" y "Democracia para Turquía", además del conocido lema de "Mujer, Vida, Libertad" en kurdo.
Abundaban banderas de los partidos políticas de izquierdas, como el HDP, el partido de la izquierda prokurda, tercero del parlamento turco, y varias formaciones pequeñas de la izquierda que esperan obtener representación en el Legislativo en las elecciones del próximo 18 de mayo gracias a su coalición electoral con el HDP.
En la celebración se reclamaba la liberación de Selahattin Demirtas y Figen Yüksekdag, exdirigentes del HDP encarcelados desde 2016 bajo acusaciones que según sus defensores son exclusivamente políticas, y se expresaba la esperanza de que un cambio de Gobierno en mayo podría poner fin a su estancia en prisión.
Las primeras celebraciones del Newroz se realizaron ayer, sábado, en algunas zonas kurdas del este de Anatolia, como Hakkari, mientras que hoy, aprovechando el domingo, hubo encuentros en decenas de ciudades de todo el país, como Ankara, Esmirna o Antalya, aparte de Estambul.
Mañana, lunes, también habrá algunas celebraciones locales y el martes, día del equinoccio, se festejará Newroz en Diyarbakir, la mayor ciudad de las regiones kurdas de Turquía, donde en algunos años se han llegado a juntar hasta un millón de personas para esta fiesta.