En una comparecencia ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Türk culpó a los grupos armados M23, ADF, CODECO, Zaïre y Nyatura de estas muertes y tachó sus ataques de "despreciables".
El austriaco lamentó que la violencia sexual también está siendo utilizada como un arma por estos grupos y advirtió que este tipo de agresiones tienen un "largo historial de uso" en el país africano.
"La violencia que soportan tantos ciudadanos en el Congo está alimentada por la impunidad y la corrupción, que minan los esfuerzos del estado para proporcionar servicios básicos a la ciudadanía, restablecer el orden y prevenir la explotación y la violencia en todo el país", aseguró.
27 OPOSITORES, PERIODISTAS Y ACTIVISTAS DETENIDOS
Además, el jefe de derechos humanos de la ONU dijo sentirse "muy preocupado" por las detenciones prolongadas de al menos 27 líderes opositores, periodistas y activistas por los derechos humanos a los que no se les está garantizando el derecho a un procedimiento legal justo por parte de las fuerzas de seguridad congoleñas.
Türk reiteró que su oficina ha registrado también "esfuerzos sistemáticos" de éstas por impedir la labor de los activistas y los periodistas en Kivu del Norte, al este del país y limítrofe con Ruanda.
"Las tensiones étnicas, así como las que existen entre los Gobiernos congoleño y ruandés generan desinformación y discursos de odio contra ciertos grupos e individuos", lamentó el austriaco.