Así lo señaló en una declaración a la televisión pública marroquí desde el Centro Hospitalario Universitario (CHU, por siglas en francés) de Marrakech, donde acompañó al rey Mohamed VI para visitar a los heridos.
El ministro marroquí apuntó que los hospitales del país han atendido a más de 4.800 heridos y añadió que el país no se ha visto falto de medios ni hospitales para tratar a los heridos.
Ait Taleb señaló que los esfuerzos se centrarán ahora en encargarse de estos damnificados "a corto, medio y largo plazo", apuntando que algunos de los heridos, que se dedicaban a la actividad agrícola y eran los únicos que mantenían a sus familias, ahora se han quedado "con una mano o pies amputados".
El terremoto del pasado viernes, el peor que ha sufrido el país en un siglo, azotó a las tres regiones sureñas de Marrakech-Safi, Souss-Massa y Draa-Tafilalet, donde hubo el mayor número de muertos y heridos, y golpeó en menor medida a las regiones de Beni Melal y Casablanca.
El sismo causó 2.901 muertos y 5.530 heridos, según el último recuento oficial del Ministerio de Interior establecido a las 13:00 hora local (GMT+1).