Duda afirmó que, en la ronda de entrevistas previas que mantuvo con todas las fuerzas políticas por separado tras las elecciones del 15 de octubre, "cada representante de la oposición decía una cosa diferente", por lo que no le convencieron de que "valiese la pena abandonar la buena tradición parlamentaria de asignar la misión de formar gobierno a la fuerza parlamentaria más votada".
Según el presidente, donde más patente quedó la falta de cohesión de la propuesta presentada por la coalición opositora fue "en uno de los temas más importantes, el de salvaguardar la soberanía de Polonia".
En las elecciones generales de hace cinco semanas, el partido ultraconservador Ley y Justicia obtuvo el mayor número de escaños, pero al no conseguir la mayoría necesaria, será la alianza formada por varios partidos de la oposición de centro derecha quien podrá formar un ejecutivo con mayoría absoluta en ambas cámaras.
Duda recordó también en la entrevista que Donald Tusk, quien, como líder de la oposición se convertirá con toda seguridad en el próximo encargado de formar gobierno, "no es el candidato a primer ministro" que él hubiera deseado.
No dudó en subrayar que usará "las prerrogativas constitucionales que permite la Constitución" en caso de que "quienes estén en el poder intenten violar las normas constitucionales, eludir o incumplir la ley vigente".
"Al mismo tiempo, lamento profundamente que ningún representante del grupo parlamentario mayoritario haya sido elegido para presidir el Parlamento o el Senado", dijo Duda en relación al rechazo en sendas votaciones de los candidatos de Ley y Justicia para la presidencia y vicepresidencia tanto de la cámara alta como de la baja.
Por otra parte, el presidente advierte sobre la posibilidad de "ahorrar dinero anulando los contratos vigentes de compra de armamento para modernizar al ejército polaco" firmados por el gobierno saliente y alerta de que ello "podría costarle caro a Polonia".
El jefe del Gobierno polaco también se declaró custodio de "los logros más importantes de los últimos ocho años" en lo relativo a "logros sociales" y "la dignidad de Polonia y de los polacos".