El Partido Popular de Pakistán (PPP), tercera fuerza en las votaciones, celebrará esta tarde una reunión para decidir una posible alianza con el Pakistán Tehreek-e-Insaf (PTI) del exmandatario preso Imran Khan; y su rival, la Liga Musulmana (PML-N) del tres veces primer ministro Nawaz Sharif.
"La reunión del comité ejecutivo central del Partido Popular de Pakistán se celebra hoy a las 19:00 horas en Islamabad (14:00 GMT) para decidir el futuro curso de acción del partido", indicó a EFE el portavoz del PPP, Hafiz Naeem.
Los 54 escaños que logró la formación del excanciller Bilawal Bhutto-Zarzadi son llave tanto para los 75 sillones de Sharif como para los casi cien independientes electos respaldados por Khan, ya que con sus votos ambas fuerzas rivales superarían los 133 apoyos necesarios para formar gobierno por mayoría simple.
El PPP mantuvo un encuentro anoche en la ciudad de Lahore con los dirigentes del PML-N para discutir la situación general del país.
"Los líderes acordaron cooperar políticamente para llevar al país a la estabilidad política", indicaron ambas fuerzas en un comunicado conjunto.
Por otro lado, un equipo de abogados y dirigentes del PTI se reunirá con Khan en la cárcel de la ciudad de Rawalpindi, donde el exmandatario se encuentra encarcelado desde el pasado agosto, para discutir la estrategia del partido tras las elecciones generales.
"Aunque la decisión final la tomará Imran Khan, creo que es poco probable que se haga una alianza con el PPP", reveló a EFE el portavoz del PTI, Ahmed Janjua.
Informes de medios locales indicaron que Nawaz Sharif habría abandonado la carrera para convertirse en el próximo primer ministro y cedido el poder de liderar negociaciones para un gobierno de coalición a su hermano, el también ex primer ministro Shehbaz Sharif.
El triunfo de los aliados de Khan en las urnas fue una gran sorpresa para Pakistán que daba por hecho que el encarcelamiento, la arremetida judicial y la desarticulación del partido, debilitarían seriamente al opositor pese a toda su popularidad.
La legislación paquistaní establece que los miembros electos de la cámara se reunirán dentro de los primeros 21 días siguientes de las elecciones, a menos de que sean convocados por el presidente de la nación.