El expresidente sudafricano Jacob Zuma podrá concurrir en las elecciones generales

"El recurso prospera. La decisión de la Comisión Electoral del 28 de marzo de 2024 (...) se anula y se sustituye por la siguiente: se desestima la objeción", señaló el tribunal, según recogen medios locales.

La participación de Zuma en los comicios fue puesta en duda cuando la IEC argumentó que, según la Constitución sudafricana, el exmandatario no podía optar a un asiento en el Parlamento al haberle sido impuesta una pena de prisión de quince meses por desacato en 2021.

Zuma recibió esa condena después de negarse a declarar repetidamente en el marco de una gran investigación conocida como la "Captura del Estado", que estudió la corrupción que afectó al aparato público sudafricano mientras él fue presidente.

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Así, el expresidente ingresó en la cárcel a comienzos de julio de 2021 y, unos días después, se desataron en Sudáfrica disturbios y saqueos masivos que, si bien empezaron como protestas en apoyo a él, degeneraron en una violencia general que dejó 354 muertos.

El 5 de septiembre de 2021, pese a llevar únicamente unos dos meses de cárcel cumplidos, se le otorgó una polémica libertad condicional por motivos de salud cuyos detalles no se hicieron públicos.

Zuma anunció el pasado mes de diciembre que no apoyaría al histórico partido gobernante Congreso Nacional Africano (CNA), sino al MK, fundado por él ese mismo mes tomando el nombre prestado de la famosa milicia que luchó contra el régimen segregacionista del apartheid, que oprimió a la población negra y mestiza de Sudáfrica entre 1948 y 1994.

El expresidente, que fue finalmente expulsado del CNA el pasado mes de enero, decidió no apoyar al partido con su voto después de que la formación apoyara las investigaciones por corrupción contra él y tras un año marcado por una creciente tensión y desencuentro con su sucesor y actual presidente del país, Cyril Rampahosa.

Este movimiento de Zuma supone un nuevo golpe para el CNA, que gobierna Sudáfrica desde al advenimiento de la democracia en 1994 pero se enfrenta una batalla electoral complicada después de que su apoyo no haya hecho más que bajar durante los últimos años.

Esto pone al partido en riesgo de perder por primera vez su mayoría parlamentaria, tal como han apuntado diferentes encuestas recientes, lo que le obligaría a gobernar en coalición.

De hecho, en los comicios locales del 1 de noviembre de 2021 el CNA sufrió los peores resultados de su historia al cosechar, por primera vez, menos del 50 % de los sufragios totales emitidos a nivel nacional (47,9 %).

Aunque Ramaphosa suele destacar los avances conseguidos en derechos laborales, vivienda o educación, lo cierto es que Sudáfrica es uno de los países más desiguales del mundo, con la raza todavía como un factor determinante, y vive altos niveles de criminalidad.

Después de verse implicado en un presunto caso de corrupción que casi fuerza su dimisión, el presidente fue reelegido en diciembre de 2022 como líder del CNA para un mandato de cinco años.

El líder de la formación, fundada en 1912, es habitualmente su candidato presidencial, por lo que, salvo imprevistos, Ramaphosa encabezará el cartel electoral del CNA en los próximos comicios.