Las investigaciones sobre la puñalada que sufrió el líder de la ultraderecha en un mitin en medio de la campaña para las elecciones de 2018, que a la postre ganaría, se habían reiniciado a instancias de la defensa de Bolsonaro, que insiste en que hubo una "conspiración" para atentar contra su vida.
Sin embargo, en un comunicado difundido este martes, la Policía Federal explicó que las "nuevas diligencias" no han aportado otros datos, por lo que se mantiene la convicción inicial de que Adelio Bispo, identificado como autor del ataque, actuó por su propia cuenta.
Según la nota, lo único que ha relevado la nueva investigación es un posible vínculo de uno de los abogados que defendió a Bisco con el tráfico de drogas, "pero sin ninguna relación con los hechos que se investigaban".
Bispo, detenido el mismo día del atentado, fue declarado no imputable por la Justicia, pues se determinó que sufre de trastornos mentales, por lo que fue ingresado en un hospital psiquiátrico en el que deberá permanecer por tiempo indeterminado.
El atentado ocurrió el 6 de septiembre de 2018 en la ciudad de Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais, durante un mitin de la campaña electoral para los comicios de octubre de ese mismo año.
Desde entonces, Bolsonaro sostiene que existen "indicios" de que el ataque "fue encomendado" por "la izquierda" y afirma que Bispo era un antiguo militante del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), que intentaría impedir su previsible victoria en las urnas.
Sin embargo, en las tres investigaciones que ha realizado hasta ahora la Policía Federal, las conclusiones han sido las mismas, que han sido confirmadas ahora, en las pesquisas dadas por concluidas este martes.
La puñalada que Bolsonaro sufrió en el abdomen impidió que el entonces candidato continuara con su campaña electoral, pero aún así fue elegido presidente en segunda vuelta frente al hoy ministro de Hacienda, Fernando Haddad, en su momento abanderado del Partido de los Trabajadores (PT).
Haddad fue elegido candidato del PT ese año debido a que el líder de esa formación, Luiz Inácio Lula da Silva, no pudo presentarse pues estaba en prisión, cumpliendo una condena por corrupción dictada en juicios luego anulados por diversas irregularidades procesales.
Tras recuperar la libertad, Lula postuló a la Presidencia en los comicios de 2022, en los que se impuso a Bolsonaro, que aspiraba a la reelección.