El comisionado del condado de Nasir, Gatluak Lew Thiep, dijo a EFE este lunes que un avión militar lanzó "múltiples bombas" sobre la pista de aterrizaje de la ciudad y sus alrededores sobre las 23.40 hora local (21.30 GMT del domingo), lo que provocó "importantes incendios, víctimas civiles y daños materiales".
"Hay personas que han muerto y heridas, pero aún no hemos confirmado las cifras", declaró Gatluak, que añadió que las víctimas fueron trasladadas a hospitales.
El funcionario acusó a las Fuerzas de Defensa del Pueblo de Sudán del Sur (SSPDF) de efectuar este ataque en represalia por la escalada de violencia en Nasir, escenario de combates, secuestros y asesinatos entre las tropas regulares y el denominado 'Ejército Blanco', una milicia local con un pasado de lealtad a la oposición sursudanesa.
Según Gatluak, aliado del vicepresidente de Sudán del Sur y líder de la oposición armada Riek Machar, afirmó que las fuerzas gubernamentales también bombardearon ayer el condado de Longechuk, en el estado septentrional de Alto Nilo, sin que por el momento se conozcan los detalles del ataque.
Estos bombardeos tienen lugar tras dos semanas de intensos choques en Nasir y después de que el ministro de Defensa, el general Chol Thon Balok, prometiera el viernes retomar la ciudad durante el funeral de un importante comandante de las SSPDF que murió el 7 de marzo durante un intento de evacuación fallido gestionado por la ONU.
Las hostilidades estallaron el pasado 4 de marzo, cuando el 'Ejército Blanco' tomó una base de las SSPDF y secuestró a una treintena de militares, lo que desencadenó una oleada de arrestos por parte del Gobierno de Yuba contra el círculo de Machar, aunque el vicepresidente se desvincula de las acciones de la milicia.
La tensión aumentó tras el intento de evacuación, en el que murieron una veintena de soldados, además del comandante y un miembro de la tripulación de Naciones Unidas, que hizo saltar las alarmas ante los temores de que Sudán del Sur se vuelva a ver inmerso en una nueva guerra como la librada entre el Gobierno y la oposición entre 2013 y 2018.
Ese conflicto se saldó con unos 400.000 muertos al poco de que el país se independizara de Sudán en 2011, y fue cerrado con un acuerdo de paz en 2018 que incluyó un reparto de poder entre el Gobierno del presidente Salva Kiir y el líder opositor Machar, aunque muchas de las cláusulas del pacto nunca se llegaron a implementar.