"La Alianza del Río Congo (AFC-M23) informa al público de que enviará, este lunes 17 de marzo de 2025, a una delegación de cinco personas a Luanda, capital de Angola, para participar en el diálogo directo a petición de las autoridades angoleñas", dijo el portavoz del grupo rebelde, Lawrence Kanyuka, en la red social X.
Kanyuka trasladó al presidente angoleño, João Lourenço, que actúa como mediador en el conflicto, el "profundo agradecimiento" de la AFC-M23 por sus "incansables esfuerzos a favor de una solución pacífica".
El pasado 12 de marzo, el Gobierno angoleño anunció el inicio de negociaciones directas de paz entre el Gobierno de la RDC y el M23 el 18 de marzo en Luanda.
Asimismo, para facilitar las conversaciones, Lourenço pidió un alto el fuego entre las partes a partir del pasado domingo.
Sin embargo, el M23 acusó en X al Gobierno de la RDC de querer "torpedear" el diálogo, al asegurar que las fuerzas gubernamentales habían bombardeado "indiscriminadamente zonas densamente pobladas" y atacado posiciones de los rebeldes durante los últimos días.
Por su parte, el Gobierno congoleño, que hasta la fecha se había opuesto a participar en conversaciones de paz que incluyeran a los rebeldes pese a la presión internacional, confirmó este domingo a EFE su asistencia al diálogo.
"Recibimos la invitación del mediador (el presidente angoleño, João Lourenço) e iremos a escucharlo. Una delegación congoleña viajará el martes a Luanda por iniciativa de la mediación", dijo Tina Salama, portavoz del presidente de la RDC, Félix Tshisekedi, en un breve mensaje enviado a EFE.
El M23, que cuenta con apoyo de Ruanda -según la ONU y países como EE.UU., Alemania y Francia-, controla las capitales de las provincias de Kivu del Norte y Kivu del Sur, fronterizas con Ruanda y ricas en minerales como el oro o el coltán, fundamentales para la industria tecnológica y en la fabricación de teléfonos móviles.
El número de muertos por el conflicto en la capital de Kivu del Norte, Goma y alrededores superó los 8.500 desde el pasado enero, según detalló a finales de febrero el ministro congoleño de Salud Pública, Samuel Roger Kamba.
En esa provincia se reanudó la actividad armada del M23 -grupo formado principalmente por tutsis que sufrieron el genocidio ruandés de 1994- en noviembre de 2021 con ataques relámpago contra el Ejército congoleño.
Desde entonces, ha avanzado por varios frentes, lo que ha elevado los temores a una posible guerra regional.
Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la misión de paz de la ONU (Monusco).