El CICO detalla en un boletín emitido este jueves que el 15 de marzo, una unidad especial de la misión militar 'Niya' abatió al menos a 45 combatientes del grupo Estado Islámico en el Gran Sahara (EIGS) en una mina de oro clandestina en Kiral, en la región de Tillabéri (oeste).
La operación, apoyada por aviones militares nigerinos y burkineses, se produjo tras intensos enfrentamientos con los yihadistas, que contaban con el refuerzo de una columna de más de un centenar de motos.
Los supervivientes, que intentaron huir hacia Burkina Faso, fueron perseguidos y atacados con dos bombardeos aéreos, que causaron más bajas en sus filas, añade el CICO.
El Ejército también incautó un importante arsenal, que incluye lanzacohetes RPG, fusiles AK-47, granadas, radios de comunicación y 15 motos. En el combate murieron nueve soldados y otros siete resultaron heridos.
Por otra parte, una ofensiva del grupo yihadista Boko Haram contra un puesto militar en Chétima Wangou, en la región de Diffa, en el sureste del país, fue repelida por el Ejército entre la noche del 16 y la madrugada del 17 de marzo.
El ataque fue llevado a cabo por unos 300 combatientes, que emplearon motos, vehículos armados y coches bomba para intentar romper las líneas de defensa del Ejército de Níger.
La rápida reacción de las fuerzas militares permitió matar a unos 50 "terroristas" y destruir varios de sus vehículos, además de incautar armas, explosivos y municiones, precisa el escrito.
Durante la operación, los aviones del Ejército atacaron y destruyeron una columna de 30 motos en fuga, y un grupo de combatientes que se refugió en una vivienda fue abatido en combate terrestre.
El CICO lamenta que cuatro soldados nigerinos murieron en el enfrentamiento.