Argelia exigió la liberación inmediata y rechazó "firmemente, tanto en la forma como en el fondo, los motivos invocados por el Fiscal antiterrorista francés para apoyar su decisión de poner en detención provisional a un agente consular (argelino)", transmitió el secretario general Lounes Magramme.
Las autoridades argelinas pidieron que se respeten estrictamente sus derechos diplomáticos y consulares y consideró que este giro "sin precedentes" en las relaciones argelino-francesas responde a una maniobra para "obstaculizar" el acercamiento tras meses de crisis bilateral.
Asimismo, Argelia cuestionó la solidez de las pruebas, considerándolas "frágiles", dado que se basan únicamente en la supuesta localización del teléfono móvil del agente consular cerca del domicilio de Amir Boukhors.
El Gobierno argelino advirtió que este "inadmisible e inaceptable" incidente tendrá consecuencias sobre las relaciones bilaterales y reafirmó su compromiso de proteger plenamente su personal diplomático.
Este incidente se produce en un momento en el que Argelia y Francia estaban superando la crisis diplomática, que comenzó el pasado verano, y que se habían desactivado con la visita a Argel del ministro francés de Exteriores, Jena-Noël Barrot, el pasado domingo.