"Estos resultados confirman la persistencia de la ocupación en ocultar la verdad al mundo", recoge un comunicado difundido por la PRCS este lunes.
El Ejército, que presentó este domingo sus conclusiones de su investigación, justificó sus tres ataques contra varias ambulancias, un camión de bomberos y un vehículo de la ONU el pasado 23 de marzo en la ciudad sureña de Rafah alegando que las fuerzas israelíes "actuaron bajo la fuerte impresión de que estaban ante una amenaza inmediata".
"El recurso habitual de la ocupación a afirmar que las misiones protegidas fueron atacadas por error, en un aberrante intento de eludir su responsabilidad por sus recurrentes violaciones del derecho internacional humanitario, no debe ser respondido con silencio", agrega en su nota.
Todos los vehículos médicos iban identificados con logos de las organizaciones y las luces de emergencias, tal y como corroboró un vídeo grabado por uno de los paramédicos asesinados, que poco después salió a la luz.
El convoy se dirigía a socorrer a paramédicos y rescatistas (de la Media Luna Roja, de la Defensa Civil y de la ONU) con los que habían perdido el contacto en Rafah tras un ataque israelí.
Israel, sin embargo, insistió en que han hallado pruebas de que había milicianos de Hamás entre los paramédicos, pese a que no las quisieron mostrar ayer durante un encuentro con la prensa extranjera que encabezó el general de división Yoav Har Even, a cargo de la investigación.
"Los resultados de la investigación de la ocupación contienen las habituales acusaciones falsas de que los equipos de rescate en Gaza pertenece a Hamás para justificar el crimen de guerra de atacar a misiones médicas en general", indicó el organismo palestino en referencia a la narrativa que Israel siempre usa para respaldar sus ataques en la Franja.
La Media Luna Roja subrayó que ha sido "pública y transparente en su seguimiento del incidente" y recordó que solo recibió la coordinación de la Cruz Roja Internacional para acceder al lugar donde se encontraban los cuerpos de sus paramédicos, siete días después de que Israel abriera fuego contra ellos.
"Invitamos a la comunidad internacional a comparar los resultados de la investigación de la ocupación con las pruebas contundentes que refutan sus resultados", agrega.
El organismo palestino también se pregunta en su nota por qué si fue "un ataque por error" Israel todavía retiene a uno de sus paramédicos, a Asaad al Nasasra.
"Si los equipos fueron realmente atacados por error, ¿por qué la ocupación sigue manteniendo cautivo a Asad Al Nasasra?", lamentaron.
Har Even confirmó ayer su arresto, pero dijo desconocer el motivo.