El capítulo dedicado a Siria de su informe anual también subraya que a finales de año se espera que el número de retornados se haya duplicado y ascienda a 3,5 millones, sumando 1,5 millones de refugiados y 2 millones de desplazados internos.
De los 1,5 millones de refugiados que se espera hayan regresado a Siria a finales de año, 700.000 podrían provenir de Turquía, 400.000 de Líbano, 200.000 de Jordania y 25.000 de Egipto, según ACNUR.
Pese a ello, Siria sigue siendo, sólo tras Sudán, el país del mundo que sufre más desplazamiento forzado, con unos 7,4 millones de desplazados internos y 6,1 millones de refugiados en otros países.
Turquía continúa siendo el principal país de acogida, con 2,9 millones de refugiados sirios, seguido por Alemania (788.000), Líbano (755.000), Jordania (611.000) e Irak (304.000), de acuerdo con el informe.
ACNUR subraya que pese a los retornos la situación sigue siendo inestable y muchas zonas todavía no son lo suficientemente seguras para garantizar el regreso de desplazados y refugiados, aunque recientes encuestas en esas comunidades indican que un 80 % de ellos siguen planeando regresar a Siria cuando las condiciones lo permitan.
El porcentaje es mucho mayor que hace un año, cuando los sondeos indicaban que un 57 % de los desplazados y refugiados buscaban regresar.