Vestido con una gorra blanca con las letras 'USA', el mandatario saludó a los periodistas desde un carro de golf tras llegar al campo sobre las 10.00 GMT, acompañado de varios colaboradores.
Una mujer le gritó "te queremos, Trump" y "gracias", entre vítores y aplausos de simpatizantes congregados cerca del 'green', donde también se escucharon repetidos cánticos con su nombre.
En general, el ambiente en el pequeño pueblo de Turnberry y cerca de su complejo está tranquilo, lejos de las protestas en su contra que tuvieron lugar el sábado en las ciudades escocesas de Edimburgo y Aberdeen.
Esta es la segunda jornada consecutiva en la que el líder republicano, que llegó a Escocia el pasado viernes en una visita personal de cuatro días, practica su deporte favorito, en medio de estrictas medidas de seguridad.
Trump recibirá esta tarde a Von der Leyen con la intención de avanzar hacia un compromiso que evite la imposición de nuevos aranceles estadounidenses del 30 % a productos europeos a partir del 1 de agosto.
El presidente también se reunirá el lunes con el primer ministro británico, Keir Starmer, antes de desplazarse a su otro complejo de golf en Aberdeen (noreste escocés), donde el martes inaugurará un nuevo campo de golf y se verá con el ministro principal de Escocia, el independentista John Swinney.