“La supervisión del proceso de cambio de combustible de Bushehr estaba en la agenda y, con el permiso de la Secretaría del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, se realizó. Vinieron dos inspectores, supervisaron el proceso y se marcharon”, explicó el el jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán, Mohammad Eslami, en declaraciones a la televisión estatal.
Eslami dijo que proceso de cambio de combustible en la central nuclear de Bushehr se llevó a cabo en el marco de la ley aprobada por el Parlamento tras la guerra de 12 días con Israel y el bombardeo de Estados Unidos contra tres instalaciones nucleares iraníes, la cual suspendió la cooperación con la agencia nuclear de la ONU y sus inspectores tuvieron que abandonar el país persa.
Según la norma, la cooperación de Irán con el OIEA debería de realizarse en una nueva modalidad, y el Consejo Supremo de Seguridad Nacional debe ser el responsable de tomar las decisiones al respecto.
“La objeción de Irán es que el sistema de gestión y liderazgo del OIEA actúa bajo la influencia de las potencias dominantes, y el propio director general es el problema principal”, denunció el jefe nuclear iraní.
El responsable iraní subrayó que los reglamentos de la agencia nuclear internacional son normas escritas que, conforme a las leyes de la ONU, deben cumplirse: “sin embargo, actúan de manera selectiva y con dobles raseros”.
No obstante, Eslami indicó que para definir la nueva forma de cooperación con el organismo se han celebrado dos reuniones y está prevista una tercera, sin precisar la fecha.
La inspección de sitios nucleares de Irán era una de la condiciones de los tres países europeos conocidos como E3 (Francia, Alemania y Reino Unido), para ampliar el plazo para restablecer las sanciones de las Naciones Unidas contra Irán más allá de la fecha limite de 18 de octubre.
Finalmente, el jueves el E3 activó el mecanismo que restaura en un plazo de 30 días las sanciones internacionales contra Teherán, que no ha accedido a esa petición, ni a la reanudación de las negociaciones con Estados Unidos.
Respecto a la medida adoptada por los europeos, Eslami dijo que Teherán ya lo habíamos previsto y que los “enemigos” siempre buscan pretextos para presionar al pueblo iraní.
“Su objetivo principal es rendir al país, pero Irán, pese a las sanciones, no se ha rendido”, concluyó.