Las dos torres, estructuras de hormigón de 160 metros de alto y con un peso de unas 56.000 toneladas, fueron destruidas tras una serie de explosiones controladas que llevaron a su derrumbe, retransmitido en directo a las 10.00 GMT por la televisión pública bávara 'RB24'.
Asistieron al derribo numerosos curiosos, lo que obligó a un nutrido dispositivo de seguridad, pues la Policía esperaba incluso miles de asistentes.
"La administración del distrito ha establecido una zona de seguridad alrededor de la central eléctrica, ha cerrado tramos de carretera y ha creado unas 1.900 plazas de aparcamiento adicionales para el periodo de la voladura", indico 'RB24' durante su cobertura.
La central nuclear de Gunremmingen dejó de producir energía a finales de 2021, en el marco del abandono de esta fuente energética, una decisión política que aceleró Angela Merkel cuando ocupaba la Cancillería Federal.
En 2011, Merkel decidió romper la moratoria aprobada por su Gobierno en 2010, espoleada por la preocupación internacional que causó el accidente de la central nuclear de Fukushima, en Japón.